Tristania: Darkest White

Noruega siempre ha sido sinónimo de black metal donde ha dominado infinitos espacios de su vida musical, el movimiento ha sabido hacerse escuchar como todas las bandas que han salido del país del norte.

En esta ocasión no vengo a reseñar ninguna banda de black metal con nuevo disco, sino una de Gothic Metal, un género eclipsado por el black metal en dicho país, pero con bandas muy reconocidas. TRISTANIA es una de ellas, tras editar “Rubicon” hace un par de años con una formación casi totalmente renovada, acaban de editar su nuevo trabajo titulado “Darkest White”, un trabajo con una madurez consolidada fruto del paso del tiempo en el seno de la banda.

Con un sonido totalmente oscuro y consolidado, que nos hace ver muy alejada su etapa sinfónica, vemos en el nuevo disco como un retorno a los inicios de la etapa con “Ashes” pero con la madurez musical de los años y muchas caras nuevas en TRISTANIA.   

11 temas nuevos componen el trabajo que se inicia con “Number”,  oscuridad que combina guturales con voces femeninas y masculinas, muy melódicas ambas, junto a potentes riffs de guitarra. Sin perder la senda empezada y ganando con una enorme pegada, nos encontramos el que fue el single adelanto del álbum, “Darkest White”. Lástima que la fuerza inicial se vea interrumpida por la tranquilidad de “Himmelfall” que para nuestra suerte, no se convierte en una senda a seguir y el tema “Requiem” lo demuestra hipnotizándonos; uno de los mejores temas del nuevo trabajo y de la nueva etapa de los noruegos. A estas alturas de la reproducción ya queda claro la personalidad musical en este nuevo disco y en cada uno de sus temas, siendo “Diagnosis” con su estribillo personal junto al toque doom que contiene la canción y que nos conduce a “Scarling”, una brillante estela de su tema predecesor.

“Night on Earth” es sin duda uno de los temas más pesados dentro de “Darkest White”, unos  guturales por parte de Anders, quien ha perdido una gran cantidad de voz con el tiempo, vuelven a recuperar gran parte de un protagonismo que en los anteriores temas no había tenido. Mariangela vuelve en “Cathedral” con un sonido totalmente personal dentro del trabajo; esta deja paso a “Lavander”, donde Kjetil y Mariangela dotan de una melancolía personal a la canción. El dominio de la vocal en “Cypher” por parte de Kjetil, sigue en la línea melancólica junto a unos perfectos riffs de guitarra para acabar de dar el cuerpo a la canción. Con el último tema a punto de iniciarse, ya queda claro que el peso vocal ha sido repartido de una forma intencionada para dar cierta variedad a la estructura general del trabajo. Anders vuelve a escena con sus guturales junto a un discreto Kjetil en “Arteries”, todo ello para despedirse con la mejor garra vocal que siempre le ha caracterizado desde sus primeros años en TRISTANIA.

Nuevo trabajo de los noruegos tras un convulsionado “Rubicon” donde casi toda la formación había sido modificada; en este nuevo trabajo se nota la solidez de la banda fruto de los años y la idea compacta del sonido que quieren mostrar a sus fans. El único efecto negativo dentro del trabajo es la gran pérdida de voz por parte de Anders fruto de numerosos años en el mundo musical, pero todo esto no debe hacernos olvidar de que nos encontramos ante un trabajo fuertemente consolidado y uno de los mejores trabajos de TRISTANIA en la actual etapa alejada de la sinfonía.