Invent Animate: Heavener

Cuarto disco de Invent Animate el cual puede marcar el futuro del grupo con una potente composición y una gran calidad de producción, para hacer de la banda un referente en el metalcore progresivo.

Los tejanos vuelven a la carga con un disco más trabajado que sus antecesores en el que se aprecian diferentes estilos y combinaciones rítmicas. Los primeros trabajos más orgánicos han derivado en algo más químico. Lo importante es poder transmitir y acompañar a los seguidores en el difícil camino de la vida, como dice la propia banda.

La voz es muy, muy versátil y está bien acompañada de los coros del batería. Durante el disco el vocalista parece saber moverse bien entre tanto ritmo diferenciado. Su nivel de volumen parece diluirse entre la música y solo en algunos cortes destaca, como en el caso de “Elysium” que es el tema mejor producido y el más destacable de la obra.

El bajo tiene la llave de la contundencia compositiva. Menudo sonido que tiene este instrumento. Suena mucho más fuerte que las guitarras y destaca por su compenetración con la batería. Las guitarras suenan muy bien aunque en pocos momentos destacan, salvo en algún detalle técnico o de producción. Suenan metálicas igualmente. La batería realiza un trabajo excelente, pero pierde el sonido de los platos por el camino que queda absorbido por la densidad atmosférica de la obra.

El grupo abusa de repetir entradas y salidas muy parecidas en las canciones, alternar ritmos, repetir intervalos y quemar la fórmula mágica que poseen. Los sonidos electrónicos realizan su función a la perfección y ayudan a digerir la vorágine desenfrenada; ofrece momentos de calma en medio de la tormenta y guía en los instantes de ebullición musical.

Música celestial para vivir

El disco arranca con el tema “Absence Persistent” y la contundencia se abre camino en una entrada poderosa que alterna espacios para la voz. Marcus Vik demuestra su polivalencia vocal y su parte melódica más cercana al nu metal. El bajo lidera la potencia sonora con un sonido devastador. La atmósfera es densa y evocadora.

“Shade Astray” es el primer sencillo que Invent Animate liberó hace ya meses en youtube y posteriormente en otras plataformas de stream. Comienza la canción con toda la banda sonando y repartiendo leña. Los pasajes sincopados destrozan el ritmo en algunas partes del tema y generan dinámica en la escucha. Se puede apreciar la calidad de producción de ‘Heavener’ en la profundidad y en el uso del espacio del sonido. Tiene muchos cambios que rompen la línea de las típicas composiciones.

Comienza de forma histriónica “Labyrinthine” haciendo referencia al título de la pista. La sensación de desorientación que la banda transmite está muy bien conseguida con unos ritmos que buscan la huida del ritmo clásico. Las alternancias melódicas se repiten. También se combinan sonidos electrónicos que aumentan la sensación de densidad atmosférica. Las composiciones están muy trabajadas y elaboradas.

“Without a Whisper” ofrece un buen sabor de boca con un ritmo que engancha y una estrofa que conecta con unas melodías que desembocan en un estribillo de elevación espiritual. Intercalan las estrofas ritmos rotos y agresivos. Tienen espacio hasta para incluir un medio tiempo en la canción. La fórmula de alternar ritmos diversos se repite, como en los demás temas del disco. Muy remarcable el estribillo. El cierre es el típico de Invent Animate: el sonido se apaga (en algunos temas de forma más rápida que en otros).

“False Meridian” tiene una entrada electrónica que da paso a un ritmo depresivo e hipnótico. Cuando la voz se incorpora transmite demencia y locura. Espacios tranquilos se mezclan con la precipitación y la melodía perturbadora. Gran trabajo rítmico de Trey Celaya a la batería; transmite mucha fuerza y dinámica, aunque es una lástima que no se aprecien mejor los platos y su brillo. No importan tanto los meridianos, siempre que se conozca la ubicación. Esta es la pista más larga de la obra.

La siguiente canción endulza ‘Heavener’, quizás de forma exagerada. “Reverie” podría ser la banda sonora de una serie, tiene todos los ingredientes de ensueño: melancolía, emoción, calidad vocal, ritmo de acompañamiento, una buena línea de bajo, detalles electrónicos, y buenos coros. ¿Es de agradecer que sea el tema más corto del disco?

Cuando piensas que lo has escuchado todo y es (casi) verdad

“Immolation Of Night” es otro sencillo de adelanto del disco. Con una entrada de incertidumbre, la voz lidera un estado violento y atroz. Diferentes ritmos machacones e inquietos acompañan las técnicas vocales diferenciadas. La sensación de reventar, en este caso la noche, es evidente. La guitarra parece mutar de sonidos y técnica de ejecución en cada parte del tema.

El siguiente corte comienza con una melodía encantadora para dar paso a la precipitación rítmica. Sorprendente es el sonido de bajo (una vez más) y la composición. “Purity Weeps” tiene un estribillo poderoso que convence. La alternancia de las diferentes partes de la canción vuelve una y otra vez a lo mismo.

“Void Surfacing” inicia con un sonido que tensa el ambiente para dar paso al desequilibrio. Gran trabajo de la guitarra de Keaton Goldwire, lástima del abuso (¿Merecido?) de nivel sonoro por parte del bajista de la banda Caleb Sherradan .Y nada nuevo. “Emberglow” camina con un ritmo muy marchoso desde el principio. Tampoco hay mucha más variación compositiva en esta pista.

“Elysium” es también un sencillo, y quizás el tema más contundente y con mayor densidad de ritmos y sonidos de ‘Heavener’. También posee momentos para la calma entre el caos. En este caso la combinación y alternancia de sonidos y atmósferas tiene más sensatez y estabilidad, y ofrece una imagen de lo que puede ser el futuro de Invent Animate. Quizás.

El último cartucho, y el primero de lo que viene

Aún sin estar en ningún top de momento dentro del estilo metalcore progresivo la banda de Texas ha dejado plasmado su estilo y su entendimiento de la música, también un último disco que puede ser el principio de algo grande. Sin más motivación aparente que la música, este grupo puede haber alcanzado su madurez.

Hay que reconocer que la joven banda, ya que llevan poco más que una década de andadura, ha conseguido impactar en el público amante del estilo, pero no lo suficiente. Con “Elysium” han plasmado su cenit. Queda por ver si sabrán mantenerlo, expandirlo y también mejorarlo.