Chris Cornell: Carry On

Es mucho más fácil opinar a toro pasado. Que si Soundgarden nunca debió separarse, que si una vez empezada la carrera en solitario Cornell no debía haberse juntado con Morello & Cia para crear Audioslave…Todo son teorías, pero quienes seguimos al sobresaliente vocalista de Seattle en el pasado, a buen seguro que siempre echaremos de menos sus tiempos en uno de los cuatro grandes del grunge.

La temida por unos y esperada por otros vuelta de Rage Against The Machine, estaba claro que traería el fin de Audioslave. Era normal, la banda llevaba repitiendo disco a disco un sonido estancado y monótono, que nunca superó su debut homónimo. A buen seguro que hubo buenos momentos en aquella banda, pero unos músicos tan opuestos en sus propuestas volarían mejor libres. O al menos, con otros compañeros de andanzas. Dicho y hecho; Morello, Tim Commerford y Brad Wilk de vuelta con Zach De La Rocha para dar conciertos con RATM y Cornell… Pues Cornell retomando su carrera en solitario, pero de no de la mejor de las maneras.

‘Euphoria Morning’ fue un disco bastante bueno, a pesar de que su propuesta ya se alejaba de la vertiente grunge de su banda madre, pero poco tiene que ver esta obra reciente.Como anticipo a este ‘Carry On’ se pudo escuchar ‘You Know My Name’, un tema comercial por completo que sirvió para dar publicidad a la última entrega de James Bond en las grandes pantallas. Alguno se podía temer lo peor; yo fui uno de ellos, tras eso y ver la portada, que parecía más cercana a un cantautor o estrella pop del momento que a un icono del rock alternativo de los 90.

Pues bien, esta obra no llega a satisfacer a los que esperábamos una continuación de la Euforia del año 99. Está claro que la voz de Chris no es lo que era, que no puede llegar a aquellos agudos gloriosos de ‘Badmotorfinger’, sobre todo tras los problemas vocales que ya cargaba en los últimos años de Soundgarden. Pero eso no es excusa para crear un álbum tan lineal y con pocos momentos destacados. La rabia contenida del principio con ‘No Such Thing’ es solo un espejismo; poco a poco se va diluyendo en medios tiempos y temas lentos, más cercanos al pop citado, incluso al soul, que al rock que se podría esperar. Curiosísima su versión de ‘Billie Jean’ de Michael Jackson, muy alejada de la original y llevada perfectamente a su terreno para crear un nuevo tema. Pero poco más…

No sería la primera vez que un artista niega cualquier vuelta al pasado, afirmando vivir intensamente el presente, para años más tardes resucitar algo que parecía muerto. En el caso de Cornell, lo espero ansioso. A veces cualquier tiempo pasado fue mejor.