Embellish: Blindead

Esta veterana formación catalana lleva ya varios años de lucha en el underground capitaneando en estas en tierras el sonido gótico de reminiscencias escandinavas. Ha llovido bastante desde su última entrega el pasado 2009, pero siguen fuertes, mantienen el sonido y aportan 12 temas nuevos que son dignos continuadores de su antecesor álbum. Los ecos a Him, To/Die/For, The 69 Eyes siguen estando más que presentes, pero es innegable que el grupo ha conseguido su sonido propio. Cosa que no es nada fácil. Sinceramente es un disco que va de menos a más y que a medida que uno lo va escuchando va entrando. Confieso que a las primeras de cambio me pareció lejos de sus anteriores obras, pero poco a poco la cosa va calando hasta mejorar mucho.

El tema más Him del disco es innegablemente “Your Love Wants to Kill Me”. Incluso el título lleva el recurrente juego de muerte y amor, propio de la banda de Valo. Gran tema, muy accesible, con un David Gohe impecable, versátil y expresivo. El aura oscura siempre está presente como en los teclados tétricos de “Bleed Me”. Con efectos de programación pero con un riff de guitarra de fondo muy deudor de los grandes temas de Paradise Lost. La base rítmica es compacta y aporta esos cimientos perfectos para que teclados guitarra y voz tomen protagonismo. Como siempre Ernesto y Gonzalo Moldes cumplen sobradamente su cometido. “Black Star” es algo recurrente y predecible, pero mantiene bien el tipo, con ese doble bombo y esas afinaciones graves a lo To/Die/For. Uno de los cortes más atractivos es “Words of Fire”, posiblemente uno de los más inmediatos y directos y con uno de los estribillos más gancheros del redondo.

En “Walk Alone” hay una bonita combinación de programaciones a lo Depeche Mode, con esos teclados envolventes y voces distorsionadas, pero hay también ese deje a lo Paradise Lost que les da mucha fuerza y dinamismo. Desgraciadamente el disco no posee una producción perfecta, pero sí contribuye a aumentar esa aura tenebrosa y oscura. Esa misma onda lleva “Key of Sadness”, otro corte en el que brillan las guitarras, en un segundo plano. El single claro es el tema que abre fuego: “Valley of Broken Smiles”. Mucha tecnología y efectos de sitar que dotan al corte de cierto aroma arábigo. La verdad es que es una de las más originales de todo el disco, y una de las mejores. Gran estribillo melódico como colofón. “Save the Breath” cuenta con una voz femenina invitada y posee una aura que recuerda al teclado y voces femeninas con los que juegan Cradle of Filth (salvando las distancias estilísticas, obviamente). La vocalista femenina repite en la calmada de inicio “Waiting the Light”, otro de los temas más atractivos del disco. Precioso final con “Heavens Closed” y ese final con el teléfono y el sollozo de una chica. Gran tema para finalizar.

“Blindead” cumple las expectativas y sigue demostrando que en este país pocas bandas hay que estén a su nivel. Abanderan esos sonidos góticos más propios de bandas escandinavas y ofrecen 12 temas más que interesantes. Quizá podría haberse pulido algo más la producción, pero vaya, siempre es cuestión de gustos, pues el disco suena bien. Hay algún momento también en el que los temas pecan de similitud, pero siempre es el precio que se puede pagar al conseguir un sonido propio. El trabajo de guitarras, voz y base rítmica es muy bueno, y los teclados y efectos rematan la faena. No me atrevería a decir que es su mejor trabajo pues le tengo mucho cariño al “Black Tears and Deep Songs”, pero quienes les hayan seguido seguro que no quedarán defraudados. Esperamos ver cómo suenan estos temas en directo.