Dream Theater: Black Clouds & Silver Linings

Cerremos los ojos, abramos los de nuestro gozo y relajemos los sentidos para disfrutar sin perjuicio alguno lo que con tanta inquietud hemos estado esperando durante tanto tiempo. Dos años después de la edición de “Systematic Chaos”, se repite el mismo ritual para tomar el primer contacto con la nueva edición de DREAM THEATER, y es que cualquier otro procedimiento podría inducirnos a perdernos ciertos detalles que no conviene sobrever. Vuelven los inconfundibles tronistas del metal progresivo, los gurús de la fantasía pura trascrita a notas, letras y sentires. Los neoyorquinos regresan con “Black Clouds & Silver Linings”, su nuevo LP en el que nos traen una nueva remesa de sentimientos, inquietudes y pesares en 6 nuevos cortes reflejo directo de aquello por lo que viven, han vivido o vivirán. Welcome back to the Dream Theater.

Lo dicen ellos, lo sabemos todos pero aunque nadie lo hubiese desvelado nunca su música siempre nos lo habría chivado. Es evidente que una de las claves que siempre han condicionado positivamente las ediciones de DREAM THEATER es la libertad total y absoluta con la que Mike Portnoy, John Petrucci y los chicos han afrontado cada nuevo disco en el que han trabajado, exceptuando aquel “Falling Into Infinity” en el que Eastwest se apuntó a una fiesta que no le correspondía. Tras 25 años de carrera y éxitos de categoría mundial, la banda ha demostrado con creces ser auto-suficiente y no necesitar de ningún productor que guíe su camino, y cualquier compañía que quiera cambiar eso ya nunca contará con DREAM THEATER entre las bandas de su catálogo. Libertad, tranquilidad e independencia musical se traducen en grandes obras deudoras de un conjunto de sentimientos cambiantes en cada nueva edición, cambios que tan solo responden a las variantes en su inquietudes, apetencias y vivencias.- “ ¿Obstáculos?” Ellos mismos. Lo confiesan en “Wither”, donde en una enternecedora balada que nada tiene que envidiar a ninguna otra que la banda haya parido antes. Nos cuentan qué pasaría si un día se sentasen y encontraran su mente en blanco, libre de ideas y aportaciones para nuevas canciones. Sin embargo, dicho obstáculo ha de ser muy bajo, puesto que “Black Clouds & Silver Linings” está tan inspirado como cualquier otro. Salta a la vista, Mike Portnoy puede dormir tranquilo…

Si en algo se traduce la autonomía con la que DREAM THEATER afrontan cada nuevo disco, es en la variedad de registros que aportan a cada retoño. Siempre nos parecerá percibir reminiscencias de uno u otro disco anterior – no en vano todo forma parte de un gran universo musical del que jamás salieron – pero jamás podremos decir que dichas coincidencias sean buscadas, y si producto de la necesidad del instante del tema en cuestión. Por supuesto esto ocurre nuevamente en “Black Clouds & Siver Linings”, donde en canciones como “The Best of Times” la propia lírica, centrada en los recuerdos y agradecimientos de Mike hacia su recientemente difunto padre, parecen reclamar un medio tiempo triste, muy emotivo pero a la vez esperanzador, que transmite agradecimiento, fé… En él, Mike, por medio de la guitarra de John Petrucci, llora un solo en la parte final del tema  – de 13:09 minutos – que la viva voz de James LaBrie no habría sabido expresar mejor su sentimiento y pesar. Estamos ante un disco donde las guitarras, generalizando, dejan de lado las virguerías en muchos momentos para transmitir mil sensaciones en punteos, ritmos o solos que ponen los pelos de punta. ¿Tema largo? Tirando mínimamente de subjetividad, el tema se me antoja bastante más corto de lo que debiera.

Pero no solo Mike se expresa en “Black Clouds & Silver Linings”. John Petrucci es quien abre el disco con “A Nightmare to Remember”, transportándonos a su infancia y contándonos lo traumático de un accidente de tráfico que sufrió con su familia. La banda sonora contiene pasajes oscuros que parecen devolvernos a los tiempos del “Train of Thought”. Lo consiguen guitarras graves, bases apocalípticas, atmósferas enfermizas y la voz de un James al que quizá a estas horas hasta el mismísimo KING DIAMOND envidiaría. La ambientación es simplemente digna de película, y la mezcolanza de registros nos habla de la  nula necesidad que DREAM THEATER tienen de emular sus obras pasadas. Sí es cierto que, en líneas generales, este es un disco más melódico que “Systematic Chaos”, contiene canciones relativamente largas (repito: incluso un tema de más de 20 minutos puede resultarnos corto, véase “Octavarium”) y quizá pudiera ser un tanto más digerible que anteriores ediciones de grupo, pero lo que es claro es que si esto se cumpe, en ningún momento fue intencionado, sino natural como la vida misma.

El viaje continúa con “A Rite of Passage”, la única canción del disco que no cuenta ningún hecho de las vidas de Mike o John (mientras que en “Systematic Chaos” James LaBrie escribía “Prophets of War”, en “Black Clouds & Silver Linings” tan solo escriben Mike y John). Un tema que nos traslada a un mundo de sociedades secretas, masonería, misticismo y esoterismo que sin embargo es el primer single del álbum, del que ya ha sido grabado un vídeo con una versión recortada de tema (de 8:36). Nuevamente hayamos elementos oscuros (¡el corte los pide a gritos!), la voz semi distorsionada de James y las extrañas composiciones de un Jordan Rudess que cada vez desvaría más. Doble bombo incluso en la parte final del tema y, en la cabecera, un estribillo pegadizo. Lógico tema-single que sin embargo no refleja todos los elementos esenciales de “Black Clouds & Silver Linings”. Sí lo hace, y a las mil maravillas “The Shattered Fortress”, canción que plasma los problemas de Mike Portnoy con el alcoholismo y todo su proceso de rehabilitación, sin omitir alucinaciones o sensaciones. Tenemos de todo: amplio catálogo de ritmos, solos para todos los gustos, riffs asesinos, punteos, dureza, emotividad… todo fluye con naturalidad y la maestría habituales de DREAM THEATER.

El sexto tema, que pone fin al disco, es “The Count of Tuscany”, y trata sobre una historia creada por John Petrucci inspirada en un castillo que visitó en Italia, donde un conde le mete en la cabeza sucesos históricos relacionados con el castillo que asustan a Mike y disparan su sentido paranóico hasta los límites de la desconfianza total. El tema respira miedo, inquietud, misterio… Son casi 20 minutos de historia intrigante, narrada por James LaBrie y musicalizada al más puro estilo DREAM THEATER. Como si de una jam se tratara, las estrofas narrativas se mezclan con diversos solos, y se confunden con riffs, bases cambiantes y, en fin, todo a lo que los neoyorquinos nos tienen acostumbrados. Apasionante tema en el que, como no, también hay cabida para los pasajes de relax.Si hay algo que evidencia mejor que nada la altura que han alcanzado DREAM THEATER es el alto nivel de exigencia al que su multitudinaria base de fans somete con cada nuevo lanzamiento. Comparable con el de los grandes iconos del rock y metal internacional, sus nuevos discos no dejarán indiferentes a nadie, y siempre generarán un alubión de opiniones y críticas en una y otra dirección. Incuso en este mismo artículo se plasmarán algunas de ellas. Lo que siempre debería permanecer como una constante invariable es el sentimiento que, canalizado muchas veces a través de técnicas que muchos músicos ni conocían, aplican a todo lo que crean. Eso es lo que les hace grandes, y en “Black Clouds & Silver Linings” lo vuelven a dejar claro. Un disco no para comparar, solo para disfrutar. Técnicamente perfecto, conceptualmente… de otro planeta.