Pretty Maids: ALIVE AT LAST

PRETTY MAIDS es uno de esos casos lamentables del mundillo del Hard Rock. Jamas
han tenido el reconocimiento que deberían en la gran mayoría de territorios
y tras 20 años en la brecha, la banda ha amasado un legado de buenos temas inconcebible
en la mitad de las bandas que hoy en dia sigue en la cresta de la ola. No hace
falta escarbar mucho en su legado para encontrar grandes canciones. Por ejemplo,
su penúltimo disco de estudio, “Carpe Diem”, era una auténtica obra maestra.
En otras palabras, no es necesario irse atrás 15 años para encontrar sus mejores
temas. Los MAIDS son una banda que disco tras disco sigue destapando el frasco
de la esencias, pese a que con su última grabación de estudio, “Planet Panic”,
han buscado un sonido mucho mas duro que no encaja en absoluto con la concepción
que los fans tienen de la banda.

Como suele ser habitual, excepto en el caso de RHAPSODY –por ejemplo- , el
directo es el elemento donde mejor se puede apreciar el poder y el saber hacer
de la banda de Ronnie Atkins y Ken Hammer. Ya en 1995 se editó un disco en directo
titulado “Screamin’ Live” que pasó bastante desapercibido, al igual que cualquier
cosa procedente de los años 80 que se editara en la franja temportal 1991-1996,
cuando los sonidos depresivos de Seattle no dejaban oir el Hard Rock de tintes
optimistas de una banda como PRETTY MAIDS.

Con el paso de los años y el reestablecimiento del Hard Rock y el Heavy Metal
en Europa, la banda ha escalado alguna que otra posición en lo que a popularidad
se refiere, y en conciertos como el del Wacken 2002, se pudo ver a miles de
enfervorizados fans con el puño en alto cantando “Future World”. Evidentemente,
ya no estamos en los años de “Red Hot And Heavy”, cuando los daneses hacían
exitosas giras teloneando a SAXON y la prensa les reconocía su trabajo. Decir
que “su epoca pasó” no es pillarse los dedos. La banda de Atkins tuvo su momento
en el tiempo, aunque ha sabido mantenerse a la altura con el paso de los años
y ha superado el tan temido “test del tiempo” que el negocio de la música utiliza
para separar a las bandas con futuro de las bandas que no lo tienen. Y PRETTY
MAIDS tenían futuro. El que están viviendo actualmente.

¿Y en qué parte del negocio de la música se ubican PRETTY MAIDS en el año 2003?
Pues en el de clásicos impepinables con una buena cohorte de seguidores en un
continente concreto. PRETTY MAIDS son una banda que seguirá teniendo una buena
base de fans en Europa, pero que sin embargo no podrá volver a pisar Estados
Unidos salvo milagro. En el caso de bandas de Hard Rock americanas como POISON
o RATT, jamás podrán pisar Europa porque será un fiasco económico impresionante
para el arriesgado promotor que se atreva con semejante hazaña.

Por suerte la banda sigue activa y la mejor manera que ha encontrado de demostrarlo
para cualquier incrédulo que dejara de seguir sus pasos tras el hundimiento
del Hard Rock a finales de los 80, ha sido con este disco en directo. “Alive
At Last” es una fiel reproducción de lo que es un concierto de PRETTY MAIDS
en el año 2002, periodo en el que se grabo el redondo, con las pistas en directo
extraídas de sendos conciertos en Tokyo, Osaka, Hamburgo y Bochum. De todas
formas, por los comentarios de Atkins entre tema y tema, la mayoría del disco
parece registrado en Osaka o Tokyo.

En cuanto a la selección de temas, se nota que han querido dar cancha a su
último trabajo de estudio, por tanto nos encontramos tres temas extraídos de
“Planet Panic”: “Virtual Brutality”, “Playing God” y el baladón “Natural High”,
que parece extraído del típico recopilatorio en cassette “Baladas Heavy” editado
en cualquier momento de finales de los 80.

“Carpe Diem” también tiene su porción de protagonismo, con “Tortured Spirit”
y el genial “Wouldn’t Miss You”, mientras que se olvidan totalmente de discos
como “Stripped” y “Scream”. De todas maneras, repasan “Anything Worth Doing
Is Worth Overdoing” con “Snakes In Eden” y “Destination Paradise”, así como
el “Spooked” de 1997 con “Live Until It Hurts”, e incluso se van hasta 1983
para tocar “Shelly The Maid” y hasta 1984 para hacer el imprescindible “Red
Hot And Heavy” y “Queen Of Dreams”.

“Sin Decade” –que abre el disco- y “Nightmare In The Neighbourhood” son la
representación de “Sin Decade” de 1992 y la obra maestra “Future World” solo
queda  representada con el clásico tema título y en el caso de la versión limitada
que tengo entre manos, además también se marcan “Rodeo”.

El disco suena perfectamente, aunque como en todos los discos en directo editados
después de 1985, el público está practicamente ausente excepto en los espacios
entre tema y tema. Pese a ser un disco en directo grabado en varios lugares
utilizan muy poco los “fade-outs” y el disco queda bastante mas unitario, sin
cortes entre un tema y otro. Respecto a la ejecución y la mezcla, ambas son
perfectas. Atkins y Hammer son la cara visible de PRETTY MAIDS, pero no se puede
ignorar la labor de un técnicamente perfecto Michael Fast a la batería y sobretodo
del teclista Jan Moller, que proporciona grandes momentos en temas como por
ejemplo el consabido “Future World”.

Imprescindible disco en directo. No dudes en comprartelo porque bien vale la
pena.