Tras mirarlo por un lado, por otro, escucharlo una vez, volverlo a escuchar, saltar temas, quedarme sólo con algunas partes… al final de todo esto este proceso se pueden ofrecer las primeras valoraciones al respecto.

 

Partimos del último punto donde la banda dejó aparcadas las cosas, que no es otro que el álbum “Songs of Darkness, Words of Light”. Desde esa línea de salida, MY DYING BRIDE han continuado su fiel y firme camino por las lindes del Doom Metal. Si bien ese hipotético andar ya no es tan contundente como tiempos atrás, la marca indiscutible de los británicos sigue patente en su nuevo “A Line Of Deathless Kings“.

 

¿Que si hemos podido oído ese riff o ese tipo de sonido anteriormente? Pues sí, pero ni mucho menos nadie esperaba una sorpresa mayúscula como la de “34.788%…Complete”. Y es que últimamente la banda se ha dedicado a mantener y reafirmar su posición privilegiada a la cabeza de la escena Doom. Aaron parece menos motivado últimamente y más sumido en sus propias convicciones; no es un hecho relevante, ya que en el fondo todo sigue igual. Pero si bien la banda ha puesto mucha más atención en ciertos aspectos, como es el caso de la grabación y mezclas de este trabajo, también ha mostrado una postura muy firme a la hora de plantear la idea de este trabajo.

Tras todos estos años de carrera de MY DYING BRIDE, podemos dejar clara una cosa: el sabor añejo de la música de esta formación es lo que realmente engrandece a estos doomsters. Sin ánimos de mostrar un fanatismo desmesurado, el encanto que ha ensalzado a estos ingleses reside en esa capacidad de facturar música de la misma forma que hace quince años. Y es por ello que poco a poco, muchos elementos se van quedando por el camino y surgen las voces críticas que piden la recuperación de los violines y de los “growls” en las voces de Aaron. La parte Death metal ha desaparecido prácticamente. Y si en temas como “To remain tombless” es posible imaginar la vuelta de tuerca aplicable a la canción para que sonase más rápida y agresiva, es difícil concebir a unos MY DYING BRIDE que vuelvan al sonido de “As the Flower Withers”. Quedan pequeñas muestras en directo de lo que fue esa época, con temas como “The Forever People”; pero es que actualmente ni la escena ni las circunstancias que nos rodean actualmente dan pie a una recuperación de aquellos valores. Muchos los añoran, pero creo no estar equivocado cuando digo que no veo que algo así se produzca, al menos de forma inminente. Pero como ellos, otros muchos. Llámense CELTIC FROST, llámense PARADISE LOST, llámense ANATHEMA.

 

En cualquier caso, “A Line Of Deathless Kings“ concentra otros muchos valores que hacen que de nuevo el disco de MY DYING BRIDE sea de lo más apetecible del momento. La banda sufrió el varapalo de no poder contar con Shaun a la batería y para ello contactó con John Bennet (THE PROPHECY) que finalmente ha unido sus fuerzas a las del resto del grupo.

Con todo y con eso, la reclusión en los Academy Studios y la posterior mezcla en The Chapel Studios ha dado como resultado una hora de música oscura dividida en nueve temas. Con una duración media de siete minutos por canción, los clásicos rasgos de la banda no han cambiado. Teclados escalofriantes, guitarras pesadas – no tanto como antaño- y uno sonido más accesible, acercan a los de WestYorkshire a un público más amplio.Aaron emplea predominantemente los registros limpios. Incluso más limpios si cabe, de lo habitual. Y a eso se le han sumado multitud de bases nuevas, poco corrientes en la banda. Temas como “One of beauty´s daughters” o “Deeper down” lo atestiguan.

 

La joya de la corona la encontramos en los temas iniciales. Sonido triste, melancólico en dos capas. Y es que por momentos parece que la música va por un lado y las voces por otro. Aún así, temas muy sentidos y que seguramente pasarán a formar parte del nuevo repertorio de la banda en directo. Los títulos lo dicen todo, y es que en “L´amour detruit”, “I cannot be loved“ o “And I walk with them” se retoma ese hilo comenzado con “Catherine Blake”, “My Wine in Silence" o “A Doomed Lover"; y por qué no decirlo, de toda la carrera de los británicos.

 

Peaceville, por tanto, asegura un lugar de una banda con un papel y un cometido muy específico dentro de la compañía, manteniendo esa imagen de marca genuina y distintiva. Esperemos que al menos, este afán expansionista conlleve una gira de soporte de presentación del álbum amplia, y que les traiga de nuevo a tierras españolas tras su aparición en la edición de este año del Metalway de Gernika. Por el momento, podemos entretenernos con el vídeo del single “Deeper Down”, oscuro donde los haya. O con ese final desatado de “The blood, the wine, the roses” MY DYING BRIDE están de vuelta.

Alejandro Pérez

Grupo:My Dying Bride

Discográfica:Peaceville/Mastertrax

Puntuación:8.5

Canciones:

  1. To remain tombless
  2. L´amour detruit
  3. I cannot be loved
  4. And I walk with them
  5. Thy raven wings
  6. Love´s intolerable pain
  7. One of beauty´s daughters
  8. Deeper down
  9. The blood, the wine, the roses

Año:2006