Blut Aus Nord : 777 Cosmosophy

Francia nunca se ha caracterizado en lo musical como una potencia, y menos aún en lo que respecta al ámbito del Metal, pero si hay que reconocer que últimamente una serie de bandas, y en especial del género Black Metal, están empezando a despuntar, ALCEST, ANOREXIA NERVOSA o la banda que nos ocupa en esta reseña, BLUT AUS NORD, además comparten características comunes en sus composiciones, como es la utilización del Ambient y algunos retazos de Avant-Garde.

Con “777 Cosmosophy” estamos al final de la trilogía comenzada por el grupo con “Sect(s)” y seguida por “The Desanctification”, una obra magna que junto con la útima parte  cierra una trilogía dividida en 18 capitulos o epitomes, como indican los franceses en sus tres discos. (El término “epitome” lo debemos entender como compendio, resumen de la historia que nos quieren contar los galos).Todo gira alrederor del número siete, numero esotérico y simbólico  donde los haya, desde los siete pecados capitales, a la creación del mundo en siete dias, pasando por el séptimo hijo de un séptimo hijo que, como todos sabemos, es un brujo.

Si las dos primeras entregas son dos obras maestras del Black Metal Ambient, por definirlo a grandes rasgos, esta tercera parte no se queda atrás, si bien en esta última entrega los elementos atmosféricos está más presentes que en los dos anteriores, el Black Metal en esencia se vislumbra de manera más apagada, aunque siempre presente, latente como una sombra amenazadora.

Otro elemento definidor de esta nueva obra es la utilización de lo industrial, lo mecánico, robótico esta muy presente, a veces el sonido resulta algo estridente, incómodo a la escucha, parece que están viendo al escuchar el disco alguna de las dos partes de Tetsuo, un mundo hibrido ente lo humano y lo cibernético.

La gran opera Black continua con el “Epitome XIV”, tema con el que se inicia el álbum, una amalgama de riffs y sonidos atmosféricos envolventes nos muestran el camino hacia un estallido Black en estado puro,  siniestro, opresivo, oscuro. Todo en este corte se desarrolla lentamente, fases incluso Doom nos envuelven hasta la asfixia, la voz de Vindsval termina de ensombrecer cualquier atisbo de luz.

El toque industrial llega de la mano del “Epitome XV”, bases programadas, ruidos distorsionados, y una voz robótica declamando en francés, nos introducen en un mundo orgánico, lleno de entrañas, vísceras y cables, llega a ser tan siniestro el ambiente que me ha llegado a recordar la B.S.O. de la pelicula “Saw”, sonidos chirriantes y estridentes se fusionan con voces amenazantes, la canción va del susurro desesperado al grito brutal en forma de Black Metal puro.

La intensidad baja algunos grados en el “Epitome XVI”, unos acordes de guitarra junto con unos teclados de fondo ayudan a relajar el ambiente opresivo de lo anteriormente escuchado, voces limpias nos marcan la melodía cadenciosa y lenta del tema, en algunas fases el tema sube el tono alcanzando rasgos épicos.

Las dos últimas partes comparten rasgos definitorios comunes; tanto “Epitome XVII” como “Epitome XVIII” son temas de marcado carácter ambient, las guitarras y los teclados se entremezclan formando un todo muy armónico, cuasi-melódico, cambios de rimos constantes y la ya tan consabida alternancia de voces limpias con guturales, todo muy mecánico, extraño, incómodo.

Gran broche final, BLUT AUS NORD ha creado una obra que será recordada como punto de inflexión en la evolución de un estilo tan cambiante como el Black Metal, su música no está hecha para todos los oídos; a veces puede resultar algo monocorde, los sentidos debes tenerlos en plenitud de facultades para poder entender su mensaje.

Ya se sabe, paladear lo bueno a veces requiere algo de esfuerzo, solo depende de ti si quieres hacerlo.