Es tan imprescindible ya un show al año de los Suaves en Barcelona como el de Quireboys. Les vimos en octubre en Calella y acudiremos siempre que vengan cerca de casa. Un placer de banda y un ejemplo de cómo adaptarse a los tiempos a la vez que paseas tu leyenda. Pero esta vez la cosa iba a ser diferente…

Es tan imprescindible ya un show al año de los Suaves en Barcelona como el de Quireboys. Les vimos en octubre en Calella y acudiremos siempre que vengan cerca de casa. Un placer de banda y un ejemplo de cómo adaptarse a los tiempos a la vez que paseas tu leyenda. Pero esta vez la cosa iba a ser diferente… y no por los teloneros o por nada especial sobre las tablas: fue por el público. Frente al bar Pepe’s aparcó un gran autobús negro del que salió una legión de gente madura provinente de Inglaterra y del norte del continente. Rock Tours, una empresa de viajes para gente de la tercera edad organiza viajes buscando el sol peninsular aderezados con el aliciente de los conciertos rockeros. Un pack imbatible que atrajo a simpáticos abueletes con ganas de marcha. Demostraron que rockeaban más duro que muchos de los presentes (entre los cuales me incluyo).

Fueron los grandes protagonistas de la velada y quedaron encantados con el show de Golden Grahams, siempre con ese punto de sobractuación por parte de su excesivo guitarrista. Van mejorando bolo a bolo y cada vez que se bajan del escenario cuentan con nuevos fans, a pesar de que en esos momentos la sala estaba algo desangelada. Pueden gustarte más o menos pero la entrega es total y sobre el escenario siempre pasan cosas… Pocas bandas pueden decir lo mismo.

El plus del concierto lo ponían las rubísimas Rock Goddess, supervivientes de la NWOBHM demostrando un estado de forma espectacular y demostrando una actitud y unas ganas tremendas. Quienes ya las habían visto en directo contaban maravillas, y os aseguro que no decepcionaron. “Satisfied Then Crucified”, “God Be with You” o “Heartache” marcaron el camino. Hasta catorce temas con un estilo muy definido y unas hermanas Turner sonrientes, haciendo posturitas y demostrando que tocan desde dentro, muy viscerales. El pulso lo lleva una Tracey Lamb con una pegada soberbia que lució en cortes como “Two Wrongs Don’t Make a Right” y “You’ve Got Fire”. “Queréis cantar o no? ¡No os oigo!”, bramaba Jody abriendo los brazos mientras la sala respondía. Destacaron sobretodo “My Angel”, “Make My Night” y en el tramo final “This Is the Day” y “Bite You to Death”. El cierre lo puso “Heavy Metal Rock ‘n’ Roll” y un bis de regalo ante el rumor del gentío. Su primer disco fue el mayor protagonista de la velada pero hubo algún tema de sus dos posteriores. Quizá sea momento de grabar material nuevo… Sus tres primeros discos valen mucho la pena (especialmente el debut), pero los cortes suenan excesivamente similares.

Tras una sesión de ovarios bien puestos llegaba la fiesta, el rimmel y el clavel en la solapa de Spike. Los eternos Quireboys volvieron a demostrar por enésima vez que son la fiesta personificada. Desde “Troublemaker (Black Eyed Son)” que la sala hirvió. Cervezas en lo alto, los “cheers” y los habituales “Give me a Yiiiiiehaa!”. Guy Griffin y Paul Guerin demuestran en cada tema clase y entrega. “Too Much of a Good Thing” y “Misled” son bienvenidas a la vez que la sala bailaba al son del combo de Newcastle. La clase de Spike y su voz siguen hechizando y más cuando el sonido de la sala permitía lucir todos los muchos detalles del grupo.

El sonido sleazy viene especialmente a cargo del piano de Keith Weir. Sus teclas llenan muchos momentos y llevan el peso de composiciones como “The Finer Stuff” (bien por recuperarla). Momento de coreo masivo en la divertida “There She Goes Again” y novedades jugosas como “Gracie B” (bastante oscura y contundente) y “St. Cecilia”. Mantienen la fuerza de “This Is Rock and Roll” del homónimo álbum y ya “Mona Lisa Smiled” es uno de los grandes momentos de sus conciertos. Spike presentó la maravillosa “Roses and Rings” a la que dio una sentida interpretación. Esta vez bebió menos y también estuvo menos comunicativo que otras veces, pero siempre atento y cariñoso con la audiencia. La recta final suele ser la de siempre y con “Hey You” la fiesta alcanzó el cénit. Si es que cada vez que uno recuerda lo que consiguieron con su primera obra… Es uno de los mejores debuts de la historia del rock con diferencia.

El momento balada vino de la mano de “Sweet Mary Ann”, muy coreada y un solo de armónica precedió a esa perfección titulada “7 O’Clock”. Desparrame total a pesar de que la mayoría de público pasaba de los 60. Los bises quedaban más que claros: Otro de los baladones imprescindibles como es “I Don’t Love You Anymore” y la ultrafestiva “Sex Party”, con su ya habitual presentación. Sonora ovación y la misma frase con la que les solemos despedirles: “siempre cumplen”, que sobrevolaba la sala mientras la gente desfilaba. Otra noche más de rock n’ roll de pedigrí de manos de una de las bandas definitivas del estilo. Son inimitables, cercanos, cachondos y poseen un catálogo extenso y notable. La habitual hora y media siempre suele dejarte con ganas de más, pero de queja ninguna.

A destacar los bajos precios del merchandising y el feeling conseguido entre la gente. Si querías practicar inglés estabas en el mejor sitio posible… El tour rockero duraría una semana, así que esos simpáticos turistas volverían a repetir el domingo en Vilanova de la Geltrú con Uli Jon Roth y Praying Mantis. Pero lo dejamos para la próxima entrega.

Fotos: Alfredo Rodríguez

Promotor:RM Concert

Día:2016-06-10

Hora:19:30

Sala:Razzmatazz 2

Ciudad:Barcelona

Teloneros:The Golden Grahams Rock Goddess

Puntuación:8