ATARFE VEGA ROCK – STRYPER

No me voy a explayar más de la cuenta en dar mi opinión sobre la fuerte carga
de  ideología religiosa que asociamos con solo escuchar o leer la palabra STRYPER.
Todos sabemos por donde van los tiros de esta banda en dichas cuestiones. Nunca
me he tomado demasiado en serio esta, digamos, farsa o exageración religiosa,
por mucho que en este AVR quedara demostrado que a aún hoy en día, los miembros
de la banda aprovechan para rezar antes de salir a escena por todos los rincones
del backstage. Algo que no hicieron sobre el escenario; para esta ocasión se
habían traído preparadas varias biblias en nuestro idioma (todo un detalle)
que arrojaron al público por si alguno quería seguir los senderos del cristianismo.
Por suerte para muchos, ahí terminó la retahíla espiritual de los norteamericanos.
A STRYPER siempre se les ha tenido respeto, incluso los no creyentes, porque
musicalmente tenían, y tienen, mucho que decir dentro de la escena del hard
rock melódico. Y personalmente, con esta parte me quedo, aunque opiniones respetables,
coherentes y con buena base argumentada en contra de la función de predicadores
de las que los hermanos Sweet y compañía se creen capaz de ejercer, las habrá de
todos los gustos. No me malinterpreten; ni lo comparto, ni los defiendo fuera
de lo estrictamente musical. Así que me centraré por tanto en la actuación
del cuarteto como cabezas de cartel del segundo día de este festival en sustitución
de TWISTED SYSTER, que como muchos saben, debido a una operación de garganta
a la que su líder Dee Snider de improviso, tiene que ser sometido.

Las circunstancias que rodeaban a la actuación de STRYPER en esta segunda
visita a nuestro país en menos de un año, son algo diferentes. En el pasado
Lorca Rock no tenían nuevo disco aún en el mercado, y la falta de rodaje de
sus miembros era más que palpable. Ahora todo es distinto. “Reborn” habrá gustado
más o habrá gustado menos, pero ha sido la excusa perfecta para que el grupo
salga a la carretera, y para que sus directos mejoren. Y lo cabe duda de que
lo han hecho.

La actuación de STRYPER, en pocas palabras, fue de sobresaliente. Bajo una
decoración sobria, “Loud N Clear” y “Loving You”, ambas de su disco debut “The
Yellow And Black Attack”, allá por el año 1984, servían de arranque para un
concierto que comenzó con expectación, y terminó por enloquecer a los allí presentes.
STRYPER ofrecieron un directo de duro y puro rock con todas las de la ley,
sonaron contundentes, fueron directos y al grano, un sonido de calidad les
arropó en todo momento, y sin lugar a dudas, fueron uno de los grandes triunfadores
de la presente edición de este festival. Todos sus miembros se encuentran en
un estado de forma envidiable. Comenzando por el batería Robert Sweet, y terminando
por el buen estado vocal que aún posee su hermano Michael. Tracy Ferrie al
bajo se encuentra más integrado, más cómodo y seguro, y Oz Fox……puro nervio
que no paró quieto ni un solo momento!!

“Rock That Makes”, una inesperada pero no por ello menos acogida “Reach Out”,
y los ya convertidos en clásicos de la banda “Calling On You” y “Free” fueron
las siguientes en caer, y a partir de ahí, el caldeado ambiente del público
hizo que el show fuera in crescendo. Como era lógico, también hubo lugar para
presentar de modo formal en directo, temas de su nueva cosecha, casos de “Open
Your Eyes”, “Live Again” (la hubiera cambiado por “When Did I See You Cry” con
los ojos cerrados si de canciones nuevas hablamos) y la propia “Reborn”. La
acogida no fue tan calurosa que cuando descargan “All For One” o “The Way” por
decir algunas, hay que reconocerlo, pero no enturbia el grato recuerdo que
sus seguidores tendrán de esta actuación. 

Para muchos, la pomposa “Honestly” o “Sing A Long” fueron las grandes ausentes,
pero, por lo menos desde mi punto de vista, era imperdonable que no incluyeran
en su listado de temas “In God We Trust”, y eso que en su nuevo disco incluso
graban una nueva versión. Es más, si la memoria no me falla, creo que no tocaron
ni un solo tema del disco que también lleva el citado nombre. Uno de los pocos
puntos negativos que se le puede poner a la descarga de STRYPER, ya que la
mítica “To Hell With The Devil”, “More Than A Man” y “Soldiers Under Command” como
cierre, supusieron una recta final de infarto, que terminó por generalizar
la participación del público. Además, una vez concluido los más o menos 90
minutos que duró el concierto, llegas a la conclusión que se hicieron cortos,
algo que siempre es buena señal.

STRYPER vinieron como meros (aunque merecidos) sustitutos de urgencia y terminaron
siendo unos de los más destacados de este caótico festival. Tan aparentemente
simple como eso.