Anvil despachan dos horas de autenticidad machacona en Barcelona
A pesar de las muchas críticas que se vertieron sobre ellos yo no sé qué más se puede esperar de Anvil a estas alturas. No engañan a nadie y tiran de lo que tienen. No busquemos trucos escénicos o un giro de guion porque sino ya no serían Anvil, y la magia se perdería. Lips dijo orgulloso que tenía 62 años y verle disfrutar de su sueño no tiene precio. Están viviendo en una nube y lo merecen tras sus 40 años de carretera.