El quinto disco de estudio de Metallica, que se denomina tanto ‘Black Album’ como ‘Metallica’, fue un claro antes y después no solo en el devenir de la formación norteamericana, sino en el heavy metal y en la música en general. Una banda que venía de hacer la que probablemente haya sido la década más prodigiosa -discográficamente hablando- de un grupo en la historia del metal lanzaba un álbum que se alejaba del sonido que la había caracterizado hasta la fecha.
El frenetismo y la ferocidad de las composiciones que se habían podido apreciar hasta escasos tres años antes con ‘…And Justice For All’ (1988) cambiaron radicalmente a un estilo más contundente y más sosegado al mismo tiempo con un toque mucho más comercial.
Tanto fue así que disco homónimo batió todos los récords de ventas hasta la fecha. Metallica era el mainstream, y la trascendencia de este lanzamiento se ha podido apreciar mejor con el paso del tiempo, donde este ‘Black Album’, probablemente junto a ‘Appetite For Destruction’ de Guns N’ Roses, marcaron la popularidad de los sonidos más duros para una comunidad global.
¿Quién no conoce a día de hoy “Nothing Else Matters” en el mundo? ¿Qué metalero no se sabe de memoria “Enter Sandman”? ¿Quién no se ha resistido a botar con “Sad But True”? Metallica hizo historia con su disco homónimo y esa leyenda que marcó perdura en nuestros días con éxitos que trascienden a la esfera del rock y el metal.
Si a esto se le suman otros grandes éxitos como la balada “The Unforgiven”, que ha tenido sus posteriores continuaciones en álbumes ulteriores -sin ser llegar a las cotas de la original-, “Wherever I May Roam” con sus toques orientales, “Through The Never” -la más rápida de este trabajo- y otras perlas como “Holier Than Thou”, “Of Wolf And Man” o “My Friend Of Misery” (por citar algunas, ya que podría ser cualquiera), Metallica conformó en 1991 un LP distinto pero no por ello peor; todo lo contrario, un triunfo rotundo -sobre todo a nivel de fama y ventas-.
No a todo el mundo le sentó bien este cambio de un corte más thrasher a uno más hard rockero de la formación -sobre todo por considerar que se habían vendido-, pero lo que está claro es que hicieron historia en la música y elevó al metal a una categoría que pocas veces ha ocupado además de terminar de conseguir que Metallica fuera la banda de heavy metal más grande de todos los tiempos.