El que fuera batería de la banda estadounidense repasa su etapa y recuerda los últimos años. También señala sus discos favoritos, y hay un claro punto de inflexión.

Dave McClain hace balance de su paso por Machine Head

Los seguidores de Machine Head recordarán que a finales de septiembre del año pasado, tanto el guitarrista Phil Demmel como el batería  Dave McClain anunciaban su salida de la banda, no sin antes hacer unos cuantos conciertos para dedicarles su adiós a sus seguidores. Poco a poco se han ido conociendo más detalles de los motivos por los que Demmel y McClain tomaron dicha decisión. En la última entrega de «Crash Bang Boom Drumming Podcast!», McClain reflexiona sobre su etapa en la banda, que fue desde 1995 hasta el pasado 2018.

Cuando se le preguntó si había un álbum de Machine Head del que estaba especialmente orgulloso, respondía que “The Blackening fue el último disco divertido que hice con ellos. Antes de eso tenían bastantes cosas asombrosas.  Con ‘The More Things Change …’ estábamos allí con el productor Colin Richardson, y estábamos disfrutando a través de las canciones. Fue increíble, había mucha energía. Y luego The Burning Red ‘ lo hicimos con Ross Robinson, y aunque era mi mejor amigo, me gritaba bastante. Puedes escucharlo en el disco. Se estaba volviendo loco y lanzaba cosas por la habitación. Luego el siguiente disco, ‘Supercharger’, lo hicimos con este chico Johnny K, y eso fue un poco más tradicional. Hicimos la pre-producción, y luego fuimos a un estudio de grabación con él, era más como construir las canciones y un poco más para hacer la producción. Y luego para ‘Through The Ashes Of Empires’ y ‘The Blackening’, lo hicimos con este ingeniero en un lugar llamado Sharkbite en Oakland. El nombre de este tipo era Mark Keaton, y era simplemente increíble. Era un gran tío para tenerlo cerca. Nos sentábamos en el estudio, escuchábamos las grabaciones y lo hablábamos. Usamos el equipo de ‘The Dark Side Of The Moon’ o algo así.  Así que hacer ‘The Blackening’ con él de nuevo, fue muy rápido”.

Según sigue contando McClain, después de la creación de «The Blackening», trabajaron con “personas distintas, en diferentes estudios, y simplemente se convirtió en algo diferente. El proceso había cambiado, y no fue divertido para mí».

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