WELTHERRSCHAFT

“Martial & cold Black Metal, sung in Germany by the cream of the
norwegian Black Metal Elite. Warning: MEZZERSCHMITT is provocative, extreme
but NON political!!” Reza el disco promocional en su parte posterior.
No entiendo la manía que tienen estos nórdicos de sacar un album
plagado de connotaciones y referencias al nazismo aclarando luego que ellos
no tienen nada que ver con la política y todo eso. Si tan claro quieren
dejarlo, ¿por qué demonios marean la perdiz con un logotipo con
dos ZZ bien resaltadas del resto de letras? Me cuesta creer que estos chicos
no hayan puesto adrede una portada con una cruz negra con letras rojas encima,
haciendo referencia al símbolo nazi que todos conocemos de sobras. No
se me mal interprete, quizá sea yo el marciano que ve fantasmas donde
no los hay, pero es que parece excesivamente evidente a primera vista.
Sigamos, el tema de la Elite del black metal noruego. Pero veamos, si tan “conocidos”
son sus miembros, ¿por qué no desvelan su identidad? Si estos
chicos fueran Samoth e Ihsahn de EMPEROR, Fenriz de DARKTRHONE o alguna otra
eminencia del black metal nórdico, ¿no habría sido más
efectivo revelar sus nombres y acaparar así más atención?
Está claro que muy “importantes” no deben ser puesto que
de serlo, nos lo habrían hecho saber a la primera de cambio, pero como
viene siendo habitual en los tiempos que corren, esto de los proyectos con miembros
de la “Elite” noruega queda muy bonito y por lo visto la gente pica.

En lo referente a lo estrictamente musical, poco hay que comentar. Este EP de
4 temas destila un black metal nórdico bastante simplón, con bastantes
samplers y riffs excesivamente monótonos. Lo de “nórdico”
lo digo más que nada por su procedencia ya que no es que recuerde mucho
a los trabajos que en los años anteriores salieron a la calle con esa
etiqueta. En otras palabras, están más cercanos a RAMMSTEIN que
a los primeros trabajos de ENSLAVED, GORGOROTH O SATYRICON.
Resumiendo, a un servidor le importa un pimiento y medio la ideología
política de cada uno, idem de su supuesto “elitismo”, pero
por favor, utilizar estos argumentos como símbolo de calidad no me parece
lo más adecuado, sobretodo cuando el trabajo en cuestión carece
de cualquier tipo de atractivo musical.