De gran salud goza la escena de viking metal en los tiempos presentes. La proliferación de bandas es ya un hecho y el éxito del battle metal (Turisas, Finntroll o Korpiklaani) ha hecho que bandas como Thyrfing o los mismos Týr sean ya referentes de un género al que le salen imitadores. La verdad es que mucho ha cambiado el estilo desde los tiempos de Bathory se pusiera la primera piedra en el metal vikingo.

Y cuando un estilo empieza a crecer y a hacerse popular las bandas referentes son las que han de abrir nuevas puertas y demostrar que el recurso de grabar una y otra vez el mismo trabajo poco les aporta como músicos. Este es el caso de Týr, vikingos de las Islas Feroe y defensores de que, por lo menos en cuanto a latitudes son más auténticos que nadie. Pueden pasear orgullosos el estandarte de dichas islas, pues hasta hace poco sólo eran noticia cuando en encuentros de fútbol internacionales su selección recibía soberanas goleadas. El caso es que lejos de anquilosarse en su propio y personal estilo, han decidido ir más allá y dan un vuelco bastante más melódico, rico con un sinfín de épica, coros majestuosos y folk nórdico.

“Sínklars Visa” entra apoteósica con unas armonías vocales más propias de la música sacra y gregoriana. Tema dominado por las acústicas y en el que queda patente su maestría por ese toque progresivo que siempre les ha caracterizado. Siguen esta onda progresiva folk en la preciosa “Gátu Rima”, de gran riff y una línea vocal que puede considerarse incluso festiva a pesar de que el tratamiento conseguido es más evocador y triste. Puede que los fans de sus anteriores compactos echen de menos algo de fuerza pero es innegable que LAND, a pesar de su evolución, es un Drakkar (nave vikinga) que llega a buen puerto.

Si hay que achacarles algo quizá sería el monumental plagio acaecido en “Valkyrjan”, gran tema pero el riff está robado directamente del clásico de Kamelot “Forever”. No es que recuerde o se parezca, es que es el mismo. Un corte como “Lokka Táttur” puede que sea considerado algo flojo comparados con el resto del disco, a medio tiempo, de aura triste pero, aún digno, muy orientado a la composición, sin apenas lucimientos y excesivamente desnudos de coro o de arrebato metalero. “Brennivin” destaca por ese deje progresivo y por un estribillo digno para el recuerdo.

Cabe destacar especialmente el grandioso estribillo de “Fípan Fagra”, perfecto ejemplo de las enormes posibilidades del grupo (gran solo de guitarra) o la inicial “Grandkvaedi Tróndar” con una preciosa introducción metiéndote de lleno en el disco: cuernos, violines, narraciones, coros y caña. La extensa “Land” recupera el pulso de la misma introducción, deambula por terrenos propicios para el grupo y luce otro buen estribillo épico. “Ocean” es la otra pieza extensa del álbum, cumple pero tampoco destaca. Finalizan con una regrabación y puesta al día de “Hail to the Hammer”.

Se han hecho un nombre, han llegado a actuar en Wacken y con este LAND creo que han decidido abarcar a mucho más público. Quizá RAGNAROCK o ERIK THE RED serán difíciles de igualar y muchos de sus fans verán en LAND una dirección equivocada, ¡pero por Odín!, también habrá muchos que vean en él una dirección lógica, valiente y atrevida. Polémicas a parte, lo conseguido en LAND hará que la banda continúe su escalada, sino al éxito por lo menos a llegar a ser un referente en el estilo y a ser capaces de girar por toda Europa como cabezas de cartel.

Jordi Zelig Tàrrega

Grupo:Týr

Discográfica:Napalm Records

Puntuación:7.8

Canciones:

  1. "Gandvkæþi Tróndar"
  2. "Sinklars visa"
  3. "Gatu Rima"
  4. "Brennivin"
  5. "Ocean"
  6. "Fipan Fagra"
  7. "Valkyrjan"
  8. "Loka Tattur"
  9. "Land"
  10. "Hail To The Hammer"

Año:2008