Steel Panther: Heavy Metal Rules

Quinto álbum de los americanos Steel Panther, un disco que continúa con el mismo sonido y letras que han caracterizado a la banda durante los diez años que llevan en activo. Un disco divertido y con mucha calidad.

Steel Panther es una banda difícil de definir. Al ponerle el apelativo de glam metal se hace referencia al estilo musical del que beben, asi como a la estética de sus miembros, pero se dejaría de lado lo mordaz de sus letras. Si se les considera un grupo parodia, se pasará por alto la calidad de sus composiciones y la fuerza de sus directos. Steel Panther es un grupo con raíces ochenteras y con muchas ganas de fiesta.

‘Heavy Metal Rules’ es una continuación en la misma línea que sus obras anteriores, cargado de heavy metal, de canciones capaces de arrancar más de una sonrisa cuando se escuchan y estribillos que se quedan metidos en la cabeza. Un disco muy ameno, de fácil escucha y con varias canciones muy buenas.

Heavy Metal Rules

El disco arranca con “Zebraman”, un fragmento del documental Heavy Metal Parking Lot, en el que se recogen las declaraciones de un fan del metal esperando para un concierto de Judas Priest. Tras esta intro arranca “All I Wanna Do Is Fuck (Myself Tonight)”, un temazo muy metalero, con una línea de bajo y batería muy cañera y unos solos de guitarra geniales, además de una letra muy cachonda y que en los conciertos va a ser muy coreada.

“Let’s Get High Tonight” tiene un estilo muy diferente al tema anterior, un ritmo más lento con un riff marcado y repetitivo que está presente en gran parte de la canción. La letra es probablemente lo mejor de la canción, hablando de una gran fiesta en casa cuando los padres no están.

“Always Gonna Be A Ho” es un temazo, una balada con un estribillo cañero al más puro estilo ochentero, en el que todo encaja a la perfección. Guitarras acústicas, solos metaleros, un bajo llevando el peso de la melodía en las partes acústicas y una batería que suena durísima en los estribillos hacen que musicalmente sea una gran canción, pero además la letra es buenísima y la voz de Michael Starr demuestra todos sus registros. Esta canción ha sido el primer single del disco y se han permitido hacer un pequeño homenaje a Queen en el videoclip.

“I’m Not Your Bitch” es un tema machacón, con un ritmo de guitarra marcado y duro, pero que no termina de enganchar. No es que la canción sea mala, pero se hace repetitiva y le falta esa chispa que tienen otros temas.

Metal políticamente incorrecto

El disco continúa con “Fuck Everybody”, otra canción muy buena, animada, cañera, con una letra genial y que en directo puede ser todo un bombazo. “Heavy Metal Rules” es la canción que le da título al álbum. Una canción un poco rara, de ritmo lento, con varias partes diferenciadas en la que las estrofas llevan un tono y el estribillo otro distinto.

El disco se vuelve más metalero con “Sneaky Little Bitch”, una canción de corte glam metal, con estrofas lentas y estribillo repetitivo y pegadizo. “Gods Of Pussy” es Steel Panther al cien por cien, una canción sobre lo buenos que son en la cama, que todas las mujeres quieren acostarse con ellos y mil tonterías más por el estilo, mientras suenan unos riff de guitarra geniales y el bajo y la batería le meten caña al tema para que Michael Starr se luzca pegando gritos.

Y para terminar una balada en acústico, “I Ain’t  Buying What You Are Selling”, un tema muy curioso en el que de nuevo Michael Starr enseña de lo que es capaz a nivel vocal y en el que Satchel se luce con la guitarra acústica. Una buena manera de cerrar un disco.

Y de esta manera llega el final del disco, tras diez canciones y poco más de media hora. Un disco que se hace corto, que tiene mucha calidad y varios temazos que sin duda entrarán en el repertorio de su próxima gira. Una genial elección si te apetece escuchar un disco de heavy metal animado y gamberro.