Grande Royale: Welcome To Grime Town

Después del gran ‘Carry On’ que se marcaron en 2021, Grande Royale presentan su sexto álbum de estudio. ‘Welcome To Grime Town’ es la perfecta continuación musical entre lo nuevo y lo antiguo, lo que ya se ha hecho y lo que, por suerte, todavía queda por hacer.

Suecia es, desde hace mucho, una de las capitales mundiales del rock y el metal. Sea cual sea el estilo que se precie, los nórdicos lo bordan. El país también es la tierra madre de notables formaciones que extrañan la simplicidad, el buen rollo y la autenticidad de décadas pasadas. Los años setenta reverberan todavía en el ambiente y es, en parte, gracias a bandas como Grande Royale. La incombustibilidad de esta banda no deja de sorprender.

Al lío

Ya en “Tell Me” Grande Royale muestran que no se van a andar con rodeos en este disco. El guitarreo de apertura se mantiene a lo largo del tema, desviándose tan solo para darle espacio a un frenético y escueto solo. Se trata de un tema tan directo que, de no estar mentalizado, su esencia de garage rock puede resultar abrumadora. Siguen los sonidos setenteros y los estribillos pegadizos en “Status Doom”, que comparte con la canción anterior un gran derroche de energía. Seguidamente, “Run Officer Run” marca la diferencia al no ser, en un principio, tan acelerada. Los elementos que conforman el tema hacen de este una pieza de sonido clásico, ideal para viajes por carretera con la melena al viento. Es un corte realmente corto y, a pesar de sintonizar perfectamente con el aura del álbum, “You Got Me Real Good” no es nada resultona.

El toque de personalidad lo aporta “Augury”, donde la banda permite conocer mejor sus capacidades en este sutil cambio de registro. Algo similar sucede con “Utopia”. Esta, con matices acústicos, consigue traspasar el desenfreno habitual de Grande Royale y tocar la fibra sensible al oyente. Los coros y los varios juegos de voces entre los miembros de la formación embellecen la canción.

De vuelta a las andadas

Pero el sonido irreverente no tarda en regresar. Lo encontramos de nuevo en “Freak Parade”, tema que, al igual que “Move Around Me”, rellena un hueco importante de esta segunda mitad del disco. Siguen incansables para cuando llega el turno de “Stark Raving Mad”, por no hablar de la electricidad que desprende “Choke On It”. Y la verdad es que es para atragantarse, porque no siempre vemos a esta versión tan incontenible de los suecos. Pegadiza como ella sola, descarga en escasos minutos la potencia arrolladora que nos manda de un empujón al desenlace de ‘Welcome To Grime Town’. Con “Seven Days No Sleep” nos despedimos definitivamente de los sonidos rockeros, para culminar con “The End”. Un final sentido, pero sin dramas. Sin duda la fiesta debe seguir, siempre y cuando sea con la música de Grande Royale.

Grande Royale cae en gracia una vez más. Y es que tiene algo interesante y diferente, que se encuentra tanto en las voces como en las melodías. A riesgo de hacer un refrito del resto de su ya bastante corpulenta discografía, la banda sigue apostando por el mismo sonido que defendieron en trabajos anteriores, desde ‘No Fuss – A Piece By Resolute Man’, disco con el que debutaron y que a estas alturas es muy apreciado por sus fans, hasta ‘Carry On’. No deja de ser otro disco fácil de digerir e idóneo para rememorar los viejos tiempos.