Gojira: Fortitude

El nuevo disco de Gojira es una obra que el público llevaba esperando con mucho ansia desde hace tiempo. Un lustro ha transcurrido desde que publicasen ‘Magma’ (2016), álbum que llevó a los franceses a dar un paso de gigante para afianzarse como uno de los grupos más a tener en cuenta de la escena metalera actual (y futura).

Futura porque los grandes se acabarán jubilando o acabarán muriendo por ley de vida, y, aunque no a nivel de estadios, algo que difícilmente se repita con algún grupo que se haya hecho popular en la última década, el testigo para encabezar la escena metalera ha de ser recogido por quienes vienen pegando fuerte desde atrás. Gojira lo ha venido haciendo con ‘L’Enfant Sauvage’ y ‘Magma’, y se reafirma con ‘Fortitude’.(el cual puedes comprar junto con el número de Power Magazine en el que salen en portada en formato CD o vinilo al mejor precio del mercado)

Como el propio Mario Duplantier nos comentaba en la entrevista que hicimos con él recientemente y que emitimos a través de nuestro canal de Twitch, las circunstancias que han contextualizado la creación de este trabajo ha sido muy distinta a la de ‘Magma’. En el momento en el que compusieron su anterior y más exitoso álbum hasta la fecha, Mario rememora el duro pasaje que estaba teniendo Gojira, mientras que con ‘Fortitude’, que se llevó a cabo entre todas las giras que han tenido en los últimos años y se grabó antes de que empezase la pandemia, las sensaciones primigenias eran bien distintas (mucho mejores).

Ese espíritu más extremo que tenían al principio se ha ido diluyendo con el paso de los años, y la evolución de la banda se ha encauzado hacia el trasteo con las atmósferas que crean con su música y la adición cada vez mayor de elementos tribales. Esto último es de lo más notable en ‘Fortitude’ cuya temática se basa en tribus propias de la selva -algo que se plasma tanto en su portada como en sus composiciones, entre las cuales el mejor ejemplo es el tercer single “Amazonia” cuya letra, videoclip y campaña para ayudar al Amazonas con miembros de artistas de la talla de Metallica ha dado que hablar-.

“Born For One Thing”, segundo single que estrenaron y, probablemente, el más potente y completo con la mejor representación de lo que es Gojira a día de hoy, abre el disco por todo lo alto. Si no conoces a Gojira, este es tu tema para iniciarte. La citada “Amazonia” traslada a la selva brasileña con multitud de instrumentos de cualquier tribu del lugar. Es cañera, pero no tanto como la anterior. A pesar de ello, permite vislumbrar la esencia de Gojira en todo su esplendor.

“Another World”, primera que lanzaron el año pasado y que no acabó de dejar las mejores sensaciones entre los fans, continúa por la línea de la anterior y, según se escucha más y más se va pegando la melodía del estribillo. Lo más destacado es, sin duda, su riff de guitarra del estribillo. “Hold On” trae de nuevo elementos instrumentales tribales y prosigue con la línea de las previas con esa atmósfera que te sumerge no solo en su música, sino en un paraje terrenal que traslada directamente al Amazonas. Te envuelve en su concepto más que te ataca como el trallazo inicial. Y está bien.

La velocidad que algunos fans han podido echar en falta se recupera en el comienzo de “New Found”, donde la guitarra recuerda en algún que otro riff a Tool. A la mitad de esta es cuando la canción da los primeros atisbos de que abandona esa mescolanza de caña-atmósfera para acabar en una contundente progresión melódica al más puro estilo Gojira con la fuerte base de Mario.

“Fortitude” es un pasaje de transición que te lleva directamente al atardecer en una choza amazónica. Coros y diversos instrumentos típicos de percusión son, junto a la melodía acústica de las cuerdas, los elementos que acercan la tranquilidad y relajación como introducción de “The Chant”, una prolongación de “Fortitude”, que da la sensación casi de ser una jam session de una calidad extrema en la que una simple base de percusión deja volar a la guitarra, que dibuja un paisaje colorido a lo largo de su transcurso.

“Sphinx” acaba con esa paz con arranque que rememora esos hits de Gojira que en directo agitan las cabezas de los presentes sin excepción. Luego se diluye un poco, pero permite escuchar uno de los fragmentos de voz más gutural del álbum y vuelve a acabar en alto para otro de los destacados junto a la de apertura.

“Into The Storm”, tercer single, empieza con un frenetismo de un estilo parecido a “The Cell” para, después de un fill en la caja de Mario, explotar en el verso como lo hace “Born For One Thing”. En su ecuador vuelve a una cadencia parecida a la del principio para desatarse en su último minuto con una épica guitarra apoyada por la siempre fiable y poderosa labor de Mario.

“The Trail” regresa al ambiente calmado y a esas atmósferas en las que el toque folclórico de Gojira se tercia un poco más oriental pero que sirven como calma antes de la tempestad final. “Grind”, la última, no deja títere con cabeza desde su letal comienzo. Al igual que con la primera, acaban este álbum con un tema cañero en el que la velocidad se vuelve a incrementar de un modo notable. De lo más metalero de este trabajo hasta la parte central de la canción, que sirve para volver a esas armonías melódicas de las guitarras que hacen de broche final perfecto para la despedida del nuevo LP de los franceses.

‘Fortitude’ remarca aún más la identidad tan particular de Gojira, algo realmente complicado de conseguir en los tiempos que corren, y destaca a los galos por un sonido inconfundible apoyado, sobre todo, en sus detalles y efectos de los riffs y melodías de la guitarra y en la bestia con la que cuentan a la batería. Mario Duplantier no solo es exquisito y contundente, sino que también ha establecido una manera de tocar inconfundible que eleva la calidad de Gojira y le afirma como uno de los mejores (sino el mejor) batería en la actualidad. Gojira va a por todas y nada ni nadie puede pararles.