Como todos, tiemblo de pánico cada vez que a uno de mis artistas favoritos le da por hacer un nuevo disco. Hoy en dia “nuevo disco” sugiere “diez temas de relleno para volver a salir de gira” en la mayoría de casos, evidenciando una sequía de ideas impresionante por parte de las viejas glorias. Algunos como KISS, directamente ni lo intentan. Otros como AEROSMITH cacarean mucho para lo que luego terminan ofreciendo. Y finalmente están otros como Alice Cooper, que nunca dejan de provocar sorpresa al volver a conseguir lo que todo el mundo desea: un disco con sonido clásico y temas que no suenen a lo que ya hemos oído hace veinta o treinta años. Cooper no es un tipo que cacaree demasiado. Al contrario: es de los que te lanzan el nuevo disco en la cara casi sin previo aviso, aumentando el factor sorpresa del que nos alimentamos melómanos y mitómanos.  Cuando además el disco es bueno, la carencia de anuncios rimbombantes tiene doble valor. Cooper sabe que lo que su público quiere y el lo da , sin más. Tuvo una época en la cual no conectó con sus fans, una época marcada por discos como “Brutal Planet” o “Dragontown”, pero hoy en dia Cooper es un “crowd-pleaser”, como se suele decir. Sus últimos tres discos, “The Eyes Of Alice Cooper”, “Dirty Diamonds” y este “Along Came a Spider” se caracterizan por ser álbumes con un halo setentero pero con un logrado sonido actual. Algo que, a priori, parece simple pero que muchos artistas no consiguen.

Cooper se ha enfrascado en una misión más ambiciosa que de costumbre: hacer un disco conceptual. Cooper ha escrito una historia sobre un asesino en serie con psicopatía arácnida (o algo por el estilo) que enreda a sus víctimas en seda antes de terminar con ellas. Procedimiento que, pese a ser muy respetable, se ve truncado el día en que el asesino se enamora de unas víctimas y no puede consumar su último instinto: el de matarla. Cooper pasa a interpretar el personaje en primera persona, dándole un tono mucho más amenazante que de costumbre a su voz y teatralizando aún más si cabe su papel como vocalista.

El disco es, como decía antes, una ración de hard rock clásico al estilo Cooper, con alguna que otra guitarra bajada de afinación y algún que otro riff más duro de lo habitual, como sucede en el gran “Catch Me If You Can”, que tiene uno de esos estribillos que enganchan a la primera. En lineas generales, el disco retoma el sonido Cooper de clásicos como “Billion Dollar Babies” o “Love It To Death”, aunque manteniendo las obvias distancias. No obstante, las guitarras deliberadamente sucias de Keri Kelli y Jason Hook en “I Know Where you Live” tienen la misión de evocar esos lejanos años en los que “the Coop” era el rey del shock rock internacional. En otras como “In Touch With Your Feminine Side” ya no hace falta evocar nada. Los efluvios setenteros son más que obvios en toda la estructura y melodía del tema, tan propia de Alice como la muleta o la guillotina que acarrea en sus directos.

Hay sitio, como siempre, para las baladas de turno en plan “Only Women Bleed”, en éste caso bajo el nombre “Killed By Love” y “Salvation”, donde el legendario artista da rienda suelta a su vertiente más sentimentalista, sin dejar de interpretar su papel de asesino arácnido. No obstante, las baladas son mínimas y en el disco predomina el hard gamberro y apestoso que tan bien sabe hacer Cooper, con “Wrapped In Silk” como tema más representativo del sonido del disco. Un hit single en toda regla. Hace treinta años, claro.

Una de las grandes ventajas de Alice Cooper es contar siempre con su banda de directo para los discos. Parece una soberana chorrada, pero la coherencia que tiene la carrera de éste hombre en años recientes parte de ese simple motivo. Contar con músicos experimentados es casi tan importante como contar con músicos que se conozcan entre ellos desde hace tiempo y sepan interactuar debidamente, labor que la sección rítmica de Eric Singer y Chuck Garric tiene más que realizada. Jason Hook y Keri Kelli aún llevan relativamente poco tiempo junto a Cooper pero han realizado infinidad de conciertos y tienen práctica tocando juntos. Todo eso se nota en el disco, para bien. No deja de sorprenderme que, cuando el legendario Cooper sigue editando discos como éste, algunos sigan pensando que debería reunirse con sus viejos compañeros de los ’70 o que debería editar otro disco de hard americano como “Hey Stoopid!”. Nada de eso es necesario a estas alturas. Podemos estar más que satisfechos de que Alice Cooper tenga la suficiente fertilidad como para parir un disco asi cuarenta años después de iniciar su carrera. Si eso no es genialidad, que me digan que demonios és. Porque, vamos, ni los STONES hacen hoy en dia discos que interesen a nadie.

Sergi Ramos

Grupo:Alice Cooper

Discográfica:SPV / Mastertrax

Puntuación:8.5

Canciones:

  1. Prologue / I Know Where You Live
  2. Vengeance Is Mine
  3. Wake The Dead
  4. Catch Me If You Can
  5. In Touch With your Feminine Side
  6. Wrapped In Silk
  7. Killed By Love
  8. Im Hungry
  9. The One That got Away
  10. Salvation
  11. I Am the Spider / Epilogue

Año:2008