Las vueltas que da la vida… Si hay un grupo que ha enterrado su leyenda y ha arrastrado su nombre hasta las cloacas, y más allá, es Wasp. Directos penosos en los últimos años, playbacks de risa, un Blackie descuidado, una banda de directo cumplidora, discos grabados por hacer algo y declaraciones de un Lawless que se ha convertido en todo lo que criticó en los 80.

Pero lo que son las cosas, ayer hubo una fantàstica entrada en el Razz II y, lo mejor: Wasp están en su mejor momento de directo de los últimos 15 años. Puede que mis expectativas estuvieran por los suelos, pero la cosa empezó bien y terminaría mejor. Llegan a la hora y media de directo, todo un milagro en esta banda, y Lawless canta mejor que nunca. Evidentemente siguen tirando de coros grabados, y se nota, pero la cosa ha mejorado del suspenso hasta el notable.

Sonaría la preciosa “Mephisto Waltz” del olvidado “Headless Children” para dar entrada a una banda que estaría flanquada por dos pantallas que escupirían videos añejos pero efectivos y divertidos. A Lawless se le ve muy mejorado, sin esa papada monstruosa y con un chorro de voz atronador que iría, eso sí, de más a menos. “On Your Knees” y “The Real Me” de los Who serían recibidas como merecían, auténticos himnos de una banda que llegó muy alto. El sonido era perfecto y la actitud que atesoraban era creíble y entregada.

“L.O.V.E. Machine” sería la tercera joya, ideal para hacer entrar en calor a un respetable muy devoto y fiel. Otra gran noticia serían lo bien que funcionan los cortes de “Babylon”. Sonaría la homónima y antes la excelente “Crazy”, demostrando que los de Blackie siguen inspirados últimamente a la hora de componer. Sus dos últimos discos están a un nivel muy alto.

Las joyas de la corona seguirían cayendo y “Wild Child” nos hizo tocar el cielo, aunque más lo haría “Arena of Pleasure”, con un juego de luces azules muy conseguido. Doug Blair y Mike Duda estuvieron correctos pero sigue quedando realmente mal hacer como que cantan los coros, cuando se nota que es todo enlatado. Y es que cuando alguien que se apellida “Duda” y te la quiere colar, es tronchante.

Coros aparte decir que la banda tiene un directo atronador y hoy en día les veo capaces de incluso liderar grandes festivales, lejos de los desastres de los 90. Parecen rejuvenecidos. Caería el mix formado por “Hellion (toda una joya), “I Dont Need No Doctor” y el “Scream Until You Like It”. La gente estaba ya en el bolsillo pero sería “Chainsaw Charlie” la que sería todo un desparrame. En los temas más coreables e hímnicos la banda no tira de samplers en los coros y es la gente la que los canta.

La nota negativa es que nos quedamos sin escuchar “Headless Children”, aunque “The Idol” y la consagrada “Take Me Up” siguen dejándonos con una sonrisa y nos convencen de que Wasp han vuelto a la vida. Blackie esta vez no iba con la moto-columpio, pero su actitud en escena es tan creíble como impresionante. ¡Vuelve a ser ese tipo que se comía la escena en los 80! Para terminar la primera tanda abordarían un “I Wanna Be Somebody” coreado a pleno pulmón. Justamente en este tema cantan (de verdad) Duda y Blair y uno entiende porqué son tan necesarios los samplers.

Tardarían hasta 10 minutos en volver, pero valdría la pena. La épica “Heavens Hung In Black” es una auténtica obra maestra y la intro de video con las palabras de Lincoln, los datos de la batalla de Gettysburg y las escenas bélicas hacen de ella uno de los mejores momentos del show. Y es que las baladas y medios tiempos de Wasp siempre han sido una maravilla. El fin de fiesta estaba cantado, “Blind In Texas”, sería el cerrojo definitivo a un completísimo concierto.

Todos los que no dábamos un duro por Wasp debemos comernos nuestras palabras. Quizá no durante tres lustros, pero ver ahora a Blackie y la banda dando el callo, dinámicos, con potencia y con un registro vocal por parte de Lawless, brillante, llega a emocionar. Su voz es puro heavy metal. Lejos quedan las crucificciones de monjas, sodomizaciones a un muñecos de trapo con el nombre de Britney Spears, columpios y sangre. Parece que ya no hacen falta trucos para tapar las carencias arrastradas durante mucho tiempo. Una gozada de concierto y un reencuentro con una banda enorme. Vuelven a estar a la altura de su leyenda.

Jordi Zelig Tàrrega / Fotos: Sergi Ramos

Promotor:Rock N Rock

Asistentes:400

Día:09/12/2009

Hora:21:00

Sala:Razzmatazz II

Ciudad:Barcelona

Puntuación:8