De un tiempo a esta parte, la fiebre por H.E.A.T. no ha dejado de crecer. Salidos de una corriente de bandas nórdicas orientadas al hard rock y al sleaze (véanse Kissin’ Dynamite, The Poodles, Casablanca y muchos otros ejemplos) parece que los suecos son los líderes del movimiento a día de hoy.

De un tiempo a esta parte, la fiebre por H.E.A.T. no ha dejado de crecer. Salidos de una corriente de bandas nórdicas orientadas al hard rock y al sleaze (véanse Kissin’ Dynamite, The Poodles, Casablanca y muchos otros ejemplos) parece que los suecos son los líderes del movimiento a día de hoy. El salto cualitativo y cuantitativo que dieron con la entrada del concursante de “Idol” Erik Grönwall los ha hecho prácticamente imparables. Dos discos tremendos como “Adress The Nation” y “Tearing down the Walls” los han situado entre la creme de la creme del hard melódico actual y si uno los ve en directo, termina convenciéndose de que son el futuro de un género que, todo sea dicho, no pasa por horas especialmente buenas desde hace muchos años.

¿Pueden ser H.E.A.T. unos nuevos Europe? Más allá de que compartan management, una cosa está clara: las canciones están ahí y el tirón femenino también. La cantidad de chicas que había entre el público en Barcelona o en Madrid era significativa y eso es un detalle a tener en cuenta. Lamentablemente ya giraron por nuestro país con éste disco y acudieron a dos festivales potentes como Rock Fest Bcn y Leyendas del Rock, lo que se tradujo en que Barcelona tuvo una entrada pobre (250 personas aproximadamente), aunque en Madrid tuvieron a más de 600. No olvidemos que también telonearon a Scorpions en Madrid, pero ese es otro tema. Madrid es un terreno muy bien abonado para el hard rock y pruebas hay multitud (véanse las 300 personas de Gotthard en Barcelona y las 1100 en Madrid).

El estado de forma de H.E.A.T. en la actualidad es insultante. Grönwall es un nervio, y Eric Rivers un mago de las seis cuerdas que se limita a hacer un buen trabajo sin alardes. Toda la banda deja a Grönwall el liderazgo y este se lo pasa muy bien en ese papel, cual gorrino en barro. No para en todo el show: salta, se agita, corea, hace corear, se baja a cantar con el público y hasta pelea con un oponente invisible sobre el escenario. Justo lo que necesitan himnos atemporales de reciente facturación como “Point of no Return”, “A Shot at Redepmtion”, “Emergency” o “Tearing Down the Walls”.

El sonido fue todo lo bueno que puede ser en Razzmatazz 2, es decir, algo que depende enteramente de la pericia del técnico para sortear los impedimentos genéricos del equipo y arquitectura de la sala. El publico disfrutó y la banda supo hacer de la sala una fiesta en todo momento, pese a la pobre entrada. Los coros del público ahogaban el sonido de la banda por momentos y quedó claro que el material más nuevo es favorito. “Mannequin Show” fue una de las más celebradas, pero sin olvidar los viejos clásicos como “Late Night Lady” o “Beg Beg Beg”. Es obvio, no obstante, que Grönwall está más comodo en su material propio.

Tal y como sucedió con el show de Steel Panther hace unos meses, la sensación general que a uno le queda es que no todo está perdido. Que quedan bandas capaces de hacer algo ya conocido pero con un toque de frescura y originalidad. H.E.A.T. son una gran esperanza para años venideros. No les dejemos caer en la indiferencia.

Promotor:Rock N Rock

Día:2014-12-04

Hora:21:00

Sala:Razzmatazz 2

Ciudad:Barcelona

Puntuación:10