Inmutable al paso del tiempo, impasible ante el ir y venir de estilos, impresionante en su labor de cantante supremo del Heavy Metal. Lo de Ronnie James Dio es de marcianos. El repaso que dio en la sala Razzmatazz a su amplio repertorio de clásicos y temas algo más oscuros fue completo, bien ejecutado y sobretodo muy sentido. No importa que tenga mas de sesenta años. Dio es Dios.

La tarde comenzó dando una vuelta por las barcelonesas Ramblas con el batería de la banda, Simon Wright. Wright ha sido batería de AC/DC durante el periodo 1983-1989 y entró en DIO en el año 1990, justo a tiempo para la edición de “Lock Up The Wolves”. Wright habló largo y tendido con nosotros en una entrevista que podréis leer en breve y acabamos hablando “off the record” del lado financiero de AC/DC y de su estancia en la banda de los hermanos Young. Interesante charla la de este hombre.

Llegando a la sala Razzmatazz, mi primera labor era aguardar al lado de la entrada al escenario hasta que pasara la banda a las tablas. Posteriormente, realizaría varias fotos del kit de batería de Simon para otra publicación, y es increíble ver a Ronnie apoyado en una caja, vaso de cerveza en mano, esperando profesionalmente su entrada en escena para entonar un inicial y apabullante “King Of Rock N’ Roll”. Desde el escenario, ver lo que acontece tras los amplificadores, como se preparan las guitarras, la conexión que existe entre los miembros de la banda durante cada canción…es una experiencia de las que perduran. Los niveles de energía que se aprecian desde ese lugar son máximos. Aunque nadie supera a Rudy Sarzo ni proponiéndoselo.

La elección del set-list parecía tener como motivo principal hacer algo diferente a los últimos conciertos de DIO, y es que recordemos que este señor está cada año en España últimamente, sea girando, en festivales o girando de nuevo. Por eso era vital que el set-list fuera renovado de la manera mas certera posible, y creo que la inclusión de “Sign Of The Southern Cross” y “Neon Knights” de BLACK SABBATH así como la interpretación de “Rock N’ Roll Children” o el nuevo tema “The Eyes”, que aparecerá en el nuevo disco “Master Of The Moon”, fueron vitales para que el concierto de Ronnie y los suyos no se convirtiera en una repetitiva estafa. Está claro que Dio es perro viejo y sabe como motivar a sus legiones de seguidores para que sigan acudiendo a los shows.

La retahíla de clásicos interpretada fue, como era de esperar, desquiciantemente buena. “Holy Diver” fue supremo, “Rainbow In The Dark” emocionante, “The Last In Line” poderosa como ella sola y “Mob Rules” tan imprescindible como siempre. La claridad del sonido estuvo directamente enfrentada con el abrasante calor que hacía allí dentro para hacer de aquello una noche mágica. Y aunque todos perdimos unos cuantos kilos viendo al eterno vocalista del Metal, lo hicimos felices.

La inclusión de Rudy Sarzo en lugar del teleñeco Jimmy Bain ha sido una adición mas que bien recibida por el público. El juego que da un personaje como Sarzo aunque sea únicamente a nivel visual es enorme, y la precisión de su interpretación, sin igual. Hasta el habitualmente mediocre Simon Wright pareció tener una buena noche. Y aunque Craig Goldy no pueda competir con el infalible Doug Aldrich, hizo un trabajo especialmente destacable a las seis cuerdas, siendo uno de los mejores momentos a su favor la interpretación de “Mob Rules”.

Hubo solos, como el de Wright tras “Stand Up And Shout”, y como el de Goldy –el cual quizá pecó de excesivamente largo-, pero fueron amenos y no molestaron demasiado la buena marcha de un show tan energético como el que sucedía sobre el escenario.

Los clásicos del talante de “Man On the Silver Mountain” o “Long Live Rock N’ Roll” palidecieron, eso si, frente a la interpretación completa de un emocionante “Gates of Babylon” que terminó por conseguir que todos arrastráramos nuestra mandíbula por el suelo.

Nada, absolutamente nada que criticar al show de DIO. No uno, sino dos bises nos regaló el personaje más bajito del Heavy Metal. “We Rock”, como suele ser habitual, y un inesperado y ya comentado “Neon Knights” que fue la justa recompensa a los que vociferaron y reclamaron la presencia de la banda.

No hay fallo posible a comentar: uno de los conciertos del año. Y probablemente, esa es la meta que se marca Ronnie siempre que se apoya en una caja, con su vaso de cerveza en la mano, antes de aparecer en escena cada noche. Mítico.

Texto y Fotos: Sergi Ramos

Datos:

Razzmatazz
Promotor: RM Concert
Publico: Lleno

Día:25/07/2004

Puntuación:10