Leyendas del Rock 2019: jornada de grandes bienvenidas y ¿despedidas?

Los australianos Airbourne llegaban a Villena con la responsabilidad de ser cabezas de cartel, algo que en España no les había sucedido hasta la fecha, y solventaron la papeleta con un concierto que fue de menos a más. Los suecos Avatar fueron otros de los que le sacaron rendimiento en su actuación a este Leyendas, y el directo de Warcry, míticos en el festival, puso el nivel por todo lo alto con un toque amargo de despedida.

Crisix: Ultra Thrash para Villena

La jornada del Leyendas del Rock 2019 más calurosa hasta ahora comenzaba con la actuación de los catalanes Crisix. Después de dejar el pabellón bien alto en Wacken, uno de nuestros grupos más internacionales llegaba a Villena para dar caña con su thrash metal marca de la casa. Al ritmo de temas como “Leech Breeder” y “Xenomorph Blood”, los catalanes salieron a darlo todo, a pesar de que gran parte del público se quedó viendo el concierto en las zonas de sombra. Nada extraño teniendo en cuenta los casi 40º que marcaban los termómetros en Villena en ese momento.

Crisix (Foto: Jesús Martínez)

Continuaron con varios temas como “Conspiranoia” o “Brutal Gadget”, además de un medley con temas de grupos como Iron Maiden, Pantera o Metallica. Tras poco más de 45 minutos, Crisix pusieron fin a su actuación con una demoledora “Ultra Thrash”, con la que se despidieron todavía bajo un sol abrasador. Como siempre, un gran concierto de los catalanes, que dejaron paso a Avatar, y que probablemente, se habría podido disfrutar un poco más en un horario algo mejor.

Avatar cautivan al Leyendas del Rock

Uno de los principales alicientes de acudir a un festival es descubrir a bandas nuevas y ver como se desenvuelven en directo algunas que conozcas poco. Y ha sido así, a base de un trabajo duro y constante, como unos Avatar muy pródigos del circuito de festivales nacional, han logrado hacerse un hueco entre la audiencia española, a base de ejecutar concierto espectacular tras concierto espectacular y de ser capaces de meterse al público más difícil en el bolsillo.

Avatar (Foto: Jesús Martínez)

Con “A Statue of a King”, los suecos demostraron que son un grupo de directos, de esos que tal vez no te seduzcan si los escuchas en tu casa pero que te enloquecen en vivo aunque no te guste su estilo. Más allá del trabajo duro y desagradecido que implica patearse tantos escenarios para alcanzar un mínimo de notoriedad, Avatar cumplen con el resto: una presencia característica, una conexión estrecha con el público y a uno de los frontmans más carismáticos de los últimos tiempos. Que hablando del señor Johannes Eckerström, cabe destacar que es un personajillo que parece salido de una novela de Edgar Alan Poe, una suerte de cruce entre Alice Cooper y Marilyn Manson que hipnotiza a la audiencia y logra que no dejes de mirarlo en todo el espectáculo.

Avatar (Foto: Jesús Martínez)

“Smells Like a Freakshow” fue una de las mejores recibidas incluso entre el público que se cobijaba entre las sombras, aunque la euforia se desató con mayor locura en un “Hail the Apocalypse” que hizo saltar a todo Villena. La banda concluyó prometiendo una gira en nuestro país el año que viene, ¡apuntado queda!. En estos truculentos tiempos en las que los titanes comienzan a retirarse y a hacer shows de una calidad tenue, tener a grupos como Avatar consiguiendo audiencias a golpe de concierto es un luminoso rayo de esperanza sobre el género.

Metal sinfónico para amenizar la tarde

Tras el freakshow montado por Avatar tenía lugar el dulce y a la vez contundente concierto de Delain. La banda holandesa se subía a las tablas en formato de quinteto, pues en sus filas echamos de menos a la guitarrista Merel Bechtold, factor que hizo que muchas de las pistas que originalmente toca en los directos, sonasen por línea, dando algo de artificialidad a la actuación.

Delain (Foto: Lolo)

Delain cuentan en su haber con un nuevo EP titulado ‘Hunter’s Moon’ del que sonó «Masters Of Destiny», que se entremezclaba entre temas más clásicos de la banda como «Suckerpunch» o «Don’t Let Go». También destacó en la selección de temas el álbum ‘Moonbathers’ que en la cronología de la banda es el último larga duracioneditado hasta la fecha. De lo que no cabe duda es que la voz angelical de Charlotte Wessels brilla todos ellos.

Delain (Foto: Lolo)

El momento curioso de la actuación fue cuando el hijo del teclista Martijn Westerholt durante la interpretación de «Mother Machine». No faltaron «We Are The Others» y «Pristine» para cerrar el show, aunque quizá hubiera funcionado mejor interpretarlas en orden inverso para dejar al respetable con mejor sabor de boca si era posible. Lo que es seguro es que Delain siempre son bien recibidos en los festivales de este calibre.

Dünedain: el mejor comienzo de gira posible

Los siguientes en actuar en el Mark Reale Stage fueron Dünedain. El espacio estaba bastante abarrotado y el grupo respondió con creces. No es casualidad que la banda diera comienzo a su gira en el Leyendas del Rock. Comenzaron su actuación con “A Un Paso Del Cielo”, “Legado” y “Vuela” con un sonido potente, de los mejores del escenario pequeño hasta ahora. La actitud de la banda en todo momento fue de comunión total con el público, dándolo todo sobre el escenario.

Dünedain (Foto: Lolo)

Continuaron alternando temas más cañeros como “Memento Mori”, “1000 Golpes” o “Por Los Siglos De Los Siglos”, con algún tema más calmado como “Eterno”. De cara al final de su actuación, interpretaron la gran “Corazón De Invierno”, cuyo estribillo fue coreado por gran parte de los presentes y con la que se despidieron. El grupo estuvo a un gran nivel durante todo el concierto, especialmente su vocalista Carlos Sanz, y por supuesto Tony Delgado.

Eluveitie enamora al Leyendas

Había cierta expectación con respecto a la actuación de Eluveitie en el Leyendas del Rock. Hace tres años, la banda suiza sacó adelante la actuación cuando prácticamente su formación acababa de desvanecerse por la salida de la banda de 4 de aua miembros, incluida la vicalista Anna Murphy. En esta edición, habiendo resurgido de sus cenizas se disponían a presentar el segundo disco grabado con esta formación, que data de 2017.

Eluveitie (Foto: Lolo)

El show se inició con «Ategnatos», tema que da nombre a su citado último disco. Fue el gran protagonista en el setlist con otros cortes del calibre de «Worship», «Rebirth» o «Deathwalker». Da gusto ver como Eluveitie parece tomar rumbo de nuevo y es que la fórmula que combina los guturales del líder Chrigel Glanzmann y las voces limpias de Fabienne Erni consigue emocionar a sus seguidores.

Eluveitie (Foto: Lolo)

Sin duda, los dos puntos álgidos tomaron forma con «The Call Of The Mountains» y el clásico «Inis Mona» que cerraba el show. Esto fue un buen aperitivo para lo que nos espera en otoño en su gira junto a Lacuna Coil.
Algo curioso de este show fue que su bajista, Kay Bren, no formó parte de la actuación y el bajo en este caso estuvo metido por línea, aún así Eluveitie consiguió un sonido bastante digno y compacto.

MorphiuM sumen el Reale en las tiniebras

El escenario Mark Reale sufrió una desbandada considerable después del multitudinario concierto de Dünedain, pero aun así hubo un importante grupo de fanáticos que acudieron a escuchar la curiosa y único propuesta de los gerundenses. En lo personal, considero que el aura tenebrosa y fatídica que desprende la banda se habría aprovechado mejor por la noche, aunque gracias al caótico baile de horarios que provocó la cancelación de Dee Snider, pudieron tocar a una hora mucho más agradecida y adecuada.

Morphium (Foto: Jesús Martínez)

El que no conoce a MorphiuM de buenas a primeras espera encontrarse a otro intento de Rammstein, cuándo la realidad es que han logrado fraguar un sonido único y muy distintivo, y es justo esta propuesta tan poco habitual lo que logró cautivar a los cientos de curiosos que deambulaban por el festival, a los que la banda atrapó con un directo atronador que logró conectar rápidamente con el público.

Morphium (Foto: Lolo)

“What Lies Behind Words” y “The Blackout” fueron de las mejores recibidas, aunque la intensidad del concierto fue constante a lo largo de todo el set. Una vez más, una propuesta nacional vuelve a alzarse como un monumento al increíble estado de forma de nuestra escena, que simplemente espera a que la audiencia dé un paso al frente y se digne a darle una más que merecida oportunidad.

Del Mark Reale a casi cabezas de cartel

Debido a incidencias con el vuelo de Dee Snider, la jornada anterior se anunciaba que, lamentablemente, el ex vocalista de Twisted Sister finalmente no actuaría en el festival. Por ello tras una reestructuración de horario, Beast In Black pasaron a tocar en el Jesús de la Rosa momentos previos a los cabezas de cartel, Airbourne, y frente a una cantidad de público muy elevada y que por el contrario no hubieran podido tener en el escenario 3 por cuestión de espacio.

Beast In Black (Foto: Lolo)

La banda finesa se encuentra inmersa en la presentación de su segundo trabajo de estudio ‘Berserker’, de igual manera que cuando vinieron hace unos meses acompañando a Nightwish. La agrupación, que comanda el ex guitarrista de Battle Beast, Anton Kabanen, ponían la nota de buen rollo y diversión a golpe de estribillos pegadizos.

Beast In Black (Foto: Jesús Martínez)

Aunque el primer tercio del show no consiguió calar demasiado, la cosa se fue animando al tiempo que el vocalista Yannis Papadopoulos presentaba temas como «Born Again», «Die By The Blade» o «Sweet True Lies». Aunque la verdadera fiesta comenzó con el ya himno «Blind And Frozen». A base de conciertos como este la banda ha escalado rápidamente en popularidad desde su fundación en 2015 y apuntan a ser de esas que llenarán grandes salas en un futuro próximo.

Airbourne: alcohol y espectáculo

Era el turno del cabeza de cartel del viernes, Airbourne. Los australianos tuvieron la oportunidad de desplegar su show completo y a las 22:30 comenzó a sonar la banda sonora de Terminator 2, señal de que la banda estaba a punto de salir a escena. Abrieron con la ya clásica “Ready To Rock” y el hit “Too Much, Too Young, Too fast” para poner patas arriba el recinto. La banda salió a tope, especialmente un Joel O’Keeffe que como siempre, estuvo incansable, dándolo todo.

Airbourne (Foto: Lolo)

Continuaron con un tema de su próximo disco, titulado “Boneshaker”, que han ido adelantando en todas las fechas de su gira europea. Con “Girls In Black”, Joel O’Keeffe se bajó al foso mientras hacía un solo y durante “Chewin’ The Fat” se golpeó una lata de cerveza en la cabeza repetidas veces. Puro espectáculo. Tras “Rivalry” y “Heartbreaker”, hubo otro momento alcohólico (no sería el último) durante “Cheap Wine & Cheaper Women”, en el que Joel O’Keeffe abrió una botella, presumiblemente de vino. Posteriormente, pidió la participación del público durante “Bottom Of The Well” para que levantaran sus mecheros en el aire.

Airbourne (Foto: Lolo)

Cambiaron de telón de fondo con “Breaking Outta Hell” para mostrar la portada de este disco, y posteriormente hicieron un homenaje a Lemmy con “It’s All For Rock ‘N’ Roll”, en la que Joel O’Keeffe se puso a servir Jack Daniels con Coca-Cola, el combinado favorito de la leyenda de Motörhead.

Airbourne (Foto: Jesús Martínez)

Se retiraron momentáneamente con “Stand Up For Rock ‘N’ Roll”, para finalizar la actuación con “Live It Up”, “Raise The Flag” y la archiconocida “Runnin’ Wild”, tema con el que se despidieron finalmente, no sin antes realizar un pequeño guiño a AC/DC, tocando un fragmento de “Let There Be Rock”, y sin que Joel O’Keeffe volviera a bajar al foso a saludar a los fans de las primeras filas, o haciendoles agacharse para luego saltar. Airbourne hicieron un gran concierto, dándolo todo, aunque quizás sobró algo de charla durante algún tema.

Warcry no defraudan, rinden y, ¿se despiden?

No hay año en que no se abra el eterno debate sobre la presencia de Warcry en cada edición del Leyendas. Hay quiénes lo consideran una tradición intocable, mientras que los detractores consideran que el espacio se le podría conceder a alguna otra banda, aunque haga lo que sea haga, siempre existirán quiénes critiquen la decisión que pueda tomar la organización. Pese a todo, lo que es innegable es que los asturianos se toman su concierto del Leyendas como un acontecimiento muy especial, y prueba de ello fue el enorme concierto que se marcaron.

Warcry (Foto: Lolo)

Abrieron con un “Alma de Conquistador” que no solo sonó pletórica, sino que lució una impresionante pirotecnia que acompañaría el resto del concierto de la banda. Curiosamente hasta este punto, en los últimos coletazos del tercer día, ninguna banda había traído una producción como la que lució Warcry, ya que ni Airbourne ni Thin Lizzy (los cabezas oficiales) trajeron nada más que un atrezzo algo más elaborado que el del resto de bandas. Puede que no fueran los cabezas, pero la banda afrontó el concierto como si la continuidad del festival dependiera del éxito de su actuación, y no se dejaron en caso ni un gramo de ganas o de pólvora.

Warcry (Foto: Lolo)

Temas como “El Guardián de Troya” o “Quiero Oírte” son parte de la cultura popular del metalero español promedio, y fueron muy celebradas por un público que tal vez quiso recibir algo más de cariño por parte de una banda a la que se veía bastante estresada sobre el escenario, principalmente debido a que Airbourne se habían comido 10 minutos de su actuación, pero tampoco ayudó que el micrófono de Víctor García fallara más que una escopeta de feria.

Warcry (Foto: Lolo)

La banda encaró la recta final con un “Tú mismo” que fue coreado hasta en la última esquina del recinto y “Hoy Gano Yo”, concluyendo con una breve charla de Víctor en la que se daba a entender de una forma un tanto enigmática que aquella iba a ser su última actuación en el Leyendas. ¿Será cierto? ¿Puede que este humilde cronista simplemente haya entendido algo que no es? Eso amigos, solo el tiempo lo dirá, pero lo cierto es que si en verdad fue su último concierto en el festival, rompieron la tradición por todo lo alto, con un espectáculo para el recuerdo y una producción de película compuesta por pirotecnia, mensajes en la pantalla y hasta una mano cornuda hinchable. Quizás el año que viene haya unos Judas Priest o unos Sabaton en el lugar que Warcry ocupaban siempre en el cartel, pero tendrán que ponerse las pilas para dejar el listón más alto.

El regreso de Koma al Leyendas

Sin tiempo de pausa tras el concierto de Warcry, daba comienzo la actuación de Koma. Los navarros salían al escenario al ritmo de “Menos Mal” y “Tío Sam”. Había ganas entre los asistentes de volver a ver a Koma en un festival importante como el Leyendas Del Rock, y eso se notó en la gran acogida con la que contó el grupo desde el primer momento. Brigi y los suyos se metieron al público en el bolsillo desde el principio con temas como “El Pato”, “Protestantes”, “Vaya Carrera Llevas Chaval” o “El Muro De Berlín”.

Koma (Foto: Jesús Martínez)

“La Almohada Cervical” puso el recinto patas arriba, siendo uno de los momentos álgidos del concierto. El público no dejó de corear cada uno de los temas, como “Caer”, “El Pobre” o “Imagínatelos”. Sin apenas pausas entre canciones, siguieron con una buena ristra de clásicos con “Sakeo”, la festiva “El Sonajero”, “El Marqués De Txorrapelada” y “Aquí Huele Como Que Han Fumao”. Como colofón final, la coreadísima “Mi Jefe”, “El Infarto” y la definitiva “Bienvenidos A Degüelto”. Parece que el parón ha sentado bien a Koma, y que han vuelto para quedarse. Conciertazo de los navarros en Villena.

Dry River conducen a 2038

He aquí un claro de que a veces toca escaparse a los escenarios menores de los festivales para descubrir verdaderas joyas. Al tiempo que acontecía la actuación de Koma en el escenario principal, los de Castellón, Dry River, darían un show memorable en el Mark Reale. Ataviados a conjunto con trajes de chaqueta rojos y camisa blanca los músicos se disponían a descargar los temas de su recientemente estrenado «2038», un álbum que narra cómo sería la vida en el futuro.

Dry River (Foto: Lolo)

El show se inició tras la presentación por parte del showman Fanfi García, tras las cuales comenzarían a caer los temas cel citado trabajo. Los tracks quedaron amenizados por las numerosas bromas que contaron los músicos durante el concierto, lo aue lo hizo aún más llevadero y divertido. La actuación de la banda de rock progresivo transcurrió como en un abrir y cerrar de ojos, sinónimo de que todos los presentes estaban disfrutando al máximo y no es para menos, pues el nivel musical estaba bien alto, en especial el de su vocalista Ángel Belinchón, aspecto que mejoro el gran sonido con el que contaron.

Uzzhuaïa bajan las revoluciones para concluir la jornada

Tras un día cargado principalmente con las eléctricas descargas de diversas bandas de power metal, escuchar el rockandrolleo clásico de Uzzhuaïa tuvo un efecto casi terapéutico para un público cansado y ensordecido. Seamos sinceros, si de verdad has estado en un festival desde que se abren las puertas, lo último de lo que tienes ganas al final de la jornada es de pasarte una hora saltando o haciendo pogos, por lo que el show de los valencianos sirvió como un excelente punto y final.

Uzzhuaïa (Foto: Jesús Martínez)

Aunque la desbandada había sido más que considerable y compartían horario con unos Saurom muy queridos en el Leyendas, los valencianos pudieron tocar ante un nada desdeñable número de seguidores que se entregaron a un sonido que, si bien era más tranquilo que el del resto de bandas del festival, no sonó en absoluto sosegado o soporífero, sino todo lo contrario, como una declaración de que no se necesita un doble pedal o chillar para ser una banda cañera.

Uzzhuaïa (Foto: Jesús Martínez)

“Destino Perdición” y “Nuestra Revolución” fueron recibidas por los irreducibles fans que se plantaron cara a las horas intempestivas, y aunque cuesta sacarle saltos y ovaciones a un público cansado, el show culminó con buena nota una jornada no tan variada como las otras pero que logró ser todo un éxito en el día más caluroso del verano.