El día en que Disturbed por fin volvió a Madrid

Jueves, pero no uno cualquiera. No en vano nos encontrábamos al inicio de la esperada Semana Santa. Pero para muchos, más ansiado era este evento, pues tras 16 años, los americanos Disturbed hacían finalmente acto de presencia en nuestro país.

Las espera se ha hecho más larga de lo habitual, y es que su anterior visita, programada para 2011, fue finalmente cancelada alegando la gran subida del precio del carburante en aquella época. Lo que les llevó a la cancelación de la totalidad de la gira europea.  Así pues la última vez que tuvimos a Disturbed en la capital fue en una fugaz visita en el FestiMad de 2003.

Sobran motivos para explicar que desde hace semanas, el concierto que se celebró durante la pasada noche en La Riviera de Madrid contaba con la totalidad de localidades vendidas. Aunque, sumado a lo relatado anteriormente, los americanos contarían para ese tour europeo con unos invitados de oro, los británicos Skindred; lo que aún añadiría más valor a la velada.

Unos teloneros de lujo

El mal tiempo y las lluvias también eran protagonistas de las fechas que acontecen, lo que hacía que los seguidores llegasen a las puertas de la sala con escasa antelación posible. Esto, añadido al largo tiempo que transcurriría entre el horario de apertura y el comienzo de los teloneros, haría que la sala se fuese llenando poco a poco hasta alcanzar su totalidad.

Skindred (Foto: Javier Bragado)

Como viene siendo habitual, el inicio del show de Skindred estuvo marcado por la archiconocida “Thunderstruck” y versión dubstep de “La Marcha Imperial”, durante la cual el cuarteto de músicos ocupaba sus respectivas posiciones. El último en hacer su aparición estelar fue su carismático vocalista Benji Webbe, quien se encargaría de animar la fiesta durante todo momento.

Skindred (Foto: Javier Bragado)

El tema de partida fue “Big Tings”,  corte que da título a su último trabajo de estudio. Poco tardó en llegar uno de sus temas más conocidos, “Rat Race”, que elevaba el mercurio de la sala de manera incontrolada. La propuesta de raggametal que desarrolla Skindred es más que apreciada por el colectivo de metalheads, que sucumben siempre a las propuestas del excéntrico cantante de la banda. No es de extrañar pues es siempre en quien se centra toda la atención debido a su llamativa estética y personalidad.

Skindred (Foto: Javier Bragado)

La actuación de los galeses tomaba forma con temas como “Ninja”, “That’s My Jam” o “Kill The Power”, que eran interpretadas con un sonido exquisito, haciendo partícipes al respetable en todo momento. Por esto podría decirse que para muchos Skindred fueron los grandes triunfadores de la noche. Siendo también costumbre, “Warning”, cerraba el setlist de la agrupación de Newport. Para este tema, la banda tiene la costumbre de hacer a sus fans quitarse la camiseta y ondearla al viento, aunque tratándose de una sala cerrada no estoy segura de esto haya sido una bunea idea.

¿Estáis preparados?

El momento que todos esperábamos estaba a punto de acontecer. A eso de las nueve de la noche se apagaban las luces y comenzaba a proyectarse en la pantalla de leds trasera una sucesión de imágenes que ilustraban la trayectoria de la banda desde sus inicios. Éstas se entremezclaban con imágenes de sus conciertos, así como con diapositivas de diversos temas más sólidos de injusticia social de cierta índole y que Disturbed siempre ha tratado de criticar en las letras de sus canciones. Toda esa pequeña película culminaba con la portada de su recién estrenado “Evolution”, el cual se encargarían de presentar en este “Evolution Tour”.

Disturbed (Foto: Javier Bragado)

Así pues “Are You Ready?” comenzaba la descarga que energía que ofrecerían David Draiman y los suyos. “Prayer”, único guiño a su “Believe” (2002), era la siguiente en caer, minutos previos a que sonara la primera perla de la noche. No tardaría en llegar “The Vengeful One”, que traía consigo a “The Animal” y “Stupify”. Por muchos discos que presente la banda “The Sickness” (2000) es uno de los que se llevará siempre la palma, y el mayor reconocimiento en los sets de los conciertos.

Disturbed (Foto: Javier Bragado)

Antes de tocar más temas, el guitarrista Dan Donegan tendría su momento de gloria donde nos deleitaría con un breve solo.  Esto nos daría unos momentos de respiro antes de  “Voices” y “Land of Confusion”, cover de Genesis, adornada por las imágenes que forman su videoclip. Aunque las versiones no suelan ser plato de buen gusto, la verdad es que Disturbed ha logrado confeccionar unas cuantas con tanta personalidad que ha logrado que pasen a ser temas habituales en su repertorio, siendo incluso algunas de estas de las más apreciadas. El primer momento emotivo de la noche llegaba con “Hold On To Memories”, y es que en este nuevo “Evolution”, Disturbed no ha escatimado en crear canciones cargadas de sentimiento.

Disturbed (Foto: Javier Bragado)

Así pues, acompañado el tema con una proyección repleta de imágenes de Chester Benington, Dimebag Darrell o Chris Cornell, empezaban a brotarnos por el rabillo del ojo las primeras lágrimas con cada nota que interpretaba la banda en formato acústico. La vuelta a la carga se materializaba al tiempo que John Moyer y Mike Wengren demostraban sus habilidades con el bajo y la batería respectivamente; dando paso a “Ten Thousand Fists” y a la potente “The Game”, que cerrarían la primera gran parte del setlist.

Que nunca te falte una razón por la que seguir luchando

Las letras de Disturbed siempre han dado de qué hablar. Lejos de ser una banda a la que le guste escribir sobre dragones, desamores o temas sin ninguna transcendencia más allá del mero entretenimiento, el cuarteto de Chicago lleva tiempo inmerso en una campaña de ayuda contra la depresión y adicción. Esto les ha llevado a componer la reciente “A Reason To Fight”, con tal de poder ayudar a las personas que sufren cierto tipo de situaciones depresivas. En consecuencia, dicho tema venía acompañado de un video con un mensaje claro de ayuda, dejando saber a todas esas personas que luchan diariamente contra los demonios de su mente, que no están solas. Imposible no romper a llorar.

“Watch You Burn” seguía el mismo curso que su antecesora, pero es sin duda “The Sound of Silence” la que volvía a ponernos los pelos de punta. La canción que Simon & Garfunkel dio vida allá por el lejano 1964, renacía cuatro años atrás, cuando la banda del señor Draiman le daba un nuevo enfoque. Casi sin quererlo se ha convertido en uno de los temas más aclamados de la banda, tanto en estudio como en directo. Es por eso que sus shows los cuatro músicos cuentan, además, con la presencia de un violinista con tal de que todo suene perfecto.

Disturbed (Foto: Javier Bragado)

Apenas nos habíamos recuperado de tal choque de emociones cuando el sonido de las sirenas de la indispensable “Indestructible,” comenzaban a hacer eco en la Riviera.  Asimismo, “Inside The Fire” nos metía de lleno en la recta final del concierto. “The Light” iniciaba la tanda de bises. Para su estribillo, el frontman pediría que se alzasen las linternas de los móviles formando un bonito paisaje. Estampa que tuve la suerte de poder vivir en el escenario con la banda y otra chica (gracia de nuevo, David). “Stricken”; la recién salida del horno,“No More” y como no podía ser de otra manera “Down With The Sickness” ponían el broche de oro a una magnífica noche.

Disturbed (Foto: Javier Bragado)

Puede que Disturbed no contara con el mejor de los sonidos, lo que hizo que algún que otro tema pasases de largo de una manera más desapercibida de lo deseable. Pero lo que sí que consiguieron los músicos fue dejar satisfechos a unos fans que habían esperado tantos años por verles. Supieron encontrar el equilibrio perfecto entre las emociones a flor de piel y la adrenalina que suponen sus temas. Solo esperamos que no tarden otros 16 años en pisar nuestro país.