Muchas veces dentro del mundo del metal se encuentran nichos o colectivos muy concretos de gente a la que le mola una serie de estilos o estilo de vida. Esto se produjo anoche en la madrileña sala La Riviera, en la que actuaba uno de los referentes elevado a la categoría casi de Dios entre sus fieles: Zakk Wylde con Black Label Society.

Barbas frondosas, chalecos de cuero, moteros y un aire stoner/sureño estaba más que presente tanto en los aledaños como dentro del recinto para una de las citas ineludibles para los fans de este estilo, no porque tocase Black Label Society (que también), sino porque su mencionado frontman es un ídolo de masas que atrae al público a sus conciertos pasen los años que pasen.

Con esta premisa clara, el emplazamiento escogido parecía ser demasiado amplio en los compases iniciales desde su apertura de puertas hasta el comienzo de los únicos teloneros que habría en toda la noche, Monolord. A lo largo de su directo, la afluencia era bastante escasa, y se percibía gran parte de la sala vacía, lo que hacía sospechar que podía no haber sido el mejor lugar para celebrar el evento.

La transición

Los artistas invitados para la velada, Monolord, no dispusieron de un tiempo largo para su espectáculo, y visto como estaba el panorama, casi se agradeció. Un stoner pesado que sobrepasaba los límites hasta de los más acérrimos a esta corriente derivó que en los escasos cuatro temas que interpretaron apenas se viese sentimiento alguno por parte del respetable, tan solo unas pocas cabezas que se meneaban de arriba hacia abajo cual figurita colgada del espejo retrovisor del coche.

Crónica Monolord Madrid 2018

Monolord (Foto: Javier Bragado)

La actitud de los suecos sobre el escenario no era mala, de hecho su bajista daba mucho juego, no obstante, la propuesta planteada no entusiasmaba a la mayoría de los presentes en su show de Madrid. El momento de mayor éxtasis en el bolo fue cuando el cantante/guitarrista sacó su móvil y encendieron las luces para hacer una foto a los (pocos) que poblaban La Riviera, con eso se dice todo. La indumentaria de este, que parecía llegar directo de un rodeo en Texas, y el rollo redneck de los 3 miembros del grupo favorecía la comunión con los asistentes, pero su música, aunque es del tipo que puede cuadrar perfectamente, no convenció a la gente, que esperaba con ganas lo que estaba por llegar.

Una lona negra con el logo de Black Label Society se extendió frente al escenario para taparlo mientras se ponía a punto para la propia banda, y tras un rato de quita-pon monitores, batería, micrófonos, etc y la posterior mini prueba de sonido para comprobar que todo estaba en orden, los estadounidenses saltaron a las tablas madrileñas para empezar su espectáculo.

Crónica Black Label Society Madrid 2018

Black Label Society (Foto: Javier Bragado)

El protagonista de esta formación, sin duda, es Zakk Wylde. Su larga trayectoria en la que destaca sobre todo junto a Ozzy Osbourne le ha servido para que su nombre sea un mito entre los mejores guitarristas de metal en la historia, y así encaró su concierto ante el público. Su trascendencia dentro del grupo se contempló desde el mismo arranque, cuando todos los fotógrafos se agolpaban y luchaban por disfrutar del lugar perfecto en el foso para retratar al vocalista y guitarrista.

Imponente a más no poder: Zakk Wylde

Solo el carisma de Wylde, aunque no hubiese siquiera música, ya hacía vibrar a los que acudieron al recinto más que la banda anterior, y cuando sonaron las primeras notas de su guitarra, apaga y vámonos. El ánimo de los aficionados se incrementó considerablemente, pero este tipo de público no es el como el del hardcore u otros estilos más agresivos con los que tienes que llevarte escudos y almohadas para protegerte y salir ileso, lo vive de una manera más «intrapersonal» podría decirse.

Crónica BLS Madrid 2018

Black Label Society (Foto: Javier Bragado)

Las canciones de Black Label Society (que presentaban su nuevo álbum ‘Grimmest Hits‘) iban sucediéndose sin apenas pausas entre ellas, y la puesta en escena no era nada del otro mundo. El concepto de este directo estaba enfocado a la música, no a la parafernalia, y por eso tema tras tema Zakk iba haciéndose más y más con el poder de la situación y haciéndose el señor legítimo de la noche en La Riviera.

No tendrá el sex appeal como hace 20 años, cuando era «el terror de las nenas», sin embargo, su forma de tocar hace que lo único que se pueda hacer sea contemplar (con asombro y envidia sana) lo que hace con todo el roster de guitarras signature personales que despliega a lo largo de la actuación.

La traca final

16 trallazos formaron parte de su repertorio, entre los que dos de ellos destacaron claramente por encima del resto. El primero de ellos llegó con «In This River«, en la que se desplegaron dos lonas sobre las pantallas de detrás de los músicos en las que aparecía Dimebag Darrell a modo de homenaje, y donde Zakk Wylde cambió la guitarra por el piano.

Crónica Black Label Society Madrid Zakk Wylde 2018

Black Label Society (Foto: Javier Bragado)

El segundo y más impactante para los que vieron tal muestra de virtuosismo fue al término de «Fire It Up«, cuando Zakk Wylde empezó a hacerse un solo de guitarra que poco a poco parecía no tener fin. Al principio de este se bajó del escenario y pasó del foso a las primeras filas de gente agolpada buscando la foto con el guitarrista haciendo gala de sus habilidades en la pista, pero fue recorriendo prácticamente media sala (sin parar de tocar con una destreza digna de admirar) hasta que llegó a una de las barras situadas en la otra punta del recinto para proseguir con su solo magistral. La guitarra detrás de la cabeza, los dientes a modo de púa y, remarco, el hecho de no cesar en ningún momento su obra, hizo de este una perfecta obra de arte de casi 10 minutos que fue lo mejor que se pudo ver anoche en La Riviera.

Zakk Wylde se proclamó, como dice el título de esta crónica de Black Label Society en Madrid, en el puto amo. No solo de la guitarra, en general, y todo lo que quedaba era quitarse el sombrero hasta el final del bolo, que llegó dos canciones más adelante con «Stillborn«. No fue el concierto más llamativo ni el que volvió a los espectadores más locos, pero fue la prueba de que los mitos se convierten en ello por algo, y que pase el tiempo que pase, Zakk Wylde es historia del metal.

Promotor:Bring The Noise / Resurrection Fest

Día:2018-03-13

Hora:20:00

Sala:La Riviera

Ciudad:Madrid

Teloneros:Monolord

Puntuación:7