DIVIDE Y… ¿VENCERÁS?

Y llegó la hora de la verdad, uno de los conciertos más importantes, al menos
para quién escribe estas líneas. Las dos bandas tenían una importante reválida
ante el público catalán que, a priori, esperaba ver la nueva tripulación que
el Sr. Rionda ha embarcado para sus Avalanch y la nueva “troupe” que ha formado
Matos con la escisión de los excepcionales Angra. Después del éxito de sus
anteriores venidas con sus consiguientes llenazos en el RAZZ II, era previsible
una buena entrada, pero una vez allí, mi sorpresa fue totalmente negativa.
Parece que André Matos y los nuevos Avalanch no son motivo suficiente para
llenar una sala de mediano aforo. Una lástima…

Pero vayamos por partes, pues la noche tuvo grandes momentos.

SHAMAN – RITUAL MÁGICO – 8’5/10

Los tres huidos, Confessori, Mariutti y Matos eran los que a priori pensábamos
que iban a quedarse con la esencia de lo que fueron Angra anteriormente. Pero
Bittencourt y Loureiro asombraron a medio mundo con el fichaje de Falaschi
y un Nova Era que sonaba más a Angra que su anterior Fireworks. Parecía que
la partida la ganaban los nuevos Angra de calle, pero Matos es mucho Matos,
y sus Shamanes hicieron un ritual a la altura de lo que se esperaba de ellos.
Puede que en estudio uno tenga dudas sobre que banda le gusta más, pero en
directo no hay duda alguna. Shaman se llevan el gato al agua. Ya no sólo es
que la banda funcione, sino que André Matos nunca había cantado tan bien como
hasta la fecha, y eso que ya lo había visto con Angra tres veces. Un set-list
totalmente orientado a lo que es su nuevo trabajo de debut: Here I Am” y “Distant
Thunder” ya apuntaban como ganan en directo y el perfecto estado vocal de
Matos. Siguieron con “For Tomorrow” y “Time Will Come” que incluso contó con
una intro con flauta. La batería de Ricardo Confessori sigue siendo tan espectacular,
con percusiones tribales y virguerías técnicas. Su solo, aunque sencillo esta
vez, sigue contando con el elemento circense que tanto deleita al público:
la rotación de baquetas en ambas manos a gran velocidad. El teclista que llevan
cede protagonismo a André, ya que a este le encanta cantar y tocar el piano
siempre que puede. Ejemplo de ello fue la sorpresiva “Lisbon” del Fireworks
de Angra, con algún pasaje más endurecido y alguna guturalidad del hermano
guitarrista de Luis Mariutti. El peculiar bajista parece que ha decidido moverse
más por la escena, algo que se agradece pues parecía fiel devoto de la escuela
Ian Hill. Otro recuerdo a Angra fue la imprescindible “Nothing To Say”, que
sin quedarles perfecta fue de las más aplaudidas. La caña la puso “Ritual”
con una extraña presentación por parte del frontman al estilo predicador de
televisión de pago americana. El cierre estaba cantado: un “Carry On” clavado
que deja claro quién fue y debería seguir siendo la voz de Angra.

Esperaba un set-list más variado, pues he leído en alguna publicación que
habían recuperado el “Livin For The Night” de su etapa Viper y la fenomenal
“Hot Patoottie (Bless You My Song)” de Meat Loaf, pero no puede haber quejas
después de un directo como este. Esperemos que la banda vuelva como cabeza
de cartel y con un set más largo.

AVALANCH: GATILLAZO EXTASIANTE – 7’75/10

El público heavy a veces toma demasiado protagonismo en problemas que en
si deberían importarle dos pimientos. Quizá esa es la grandeza o la miseria
del género, pero si un grupo se separa y si se dicen de todo en varias publicaciones,
hace que la gente tome partidismos innecesarios que perjudican a ambas partes.
Avalanch es el vivo ejemplo de ello, y si alguien era capaz de asistir al
concierto y juzgar de manera imparcial, la opinión es muy clara… Los nuevos
fichajes han aportado una consistencia digna de envidia y os puedo asegurar
que hoy por hoy, los “nuevos”, suenan mucho mejor que los clásicos. Compactos
y elegantes desde la inicial “Lucero”. Un himno que ya nos trae novedades
interesantes: Rionda y Daniel León hacen coros. Hasta ahora el maestro nunca
se había encaramado al micro para mostrar sus dotes vocales. La verdad es
que sin hacerlo mal si que deberían ensayar un poco más, pues en los Poetas
Han Muerto los coros son un elemento clave. Afortunadamente el escaso pero
fiel público ayudó al dueto de coristas. Ramón Lage introducía los temas con
breves parrafadas dando un toque teatral realmente acertado. En “Cien Veces”
quedó claro que las canciones de su último trabajo las borda. “Niño” hubiera
sido uno de los mejores momentos de la noche de no ser a que el sampler falló
y apenas se oía la narración. Si alguien me sorprendió gratamente fue su nuevo
baterista Marco Álvarez, toda una lección de como mandar tras los parches.
Continuaron con “Jamás”, pero con “El ángel caído” llegó la primera prueba
de fuego para Lage. Sorprendió el hecho de que se haya bajado tanto de tono,
y sin hacerlo mal, fue la más deslucida de la noche. Otro de los “momentos”
fue la apoteósica “Del cielo a la tierra” con el dueto Matos-Lage pese al
fallo inicial, se olvidaron conectar el micro del brasileño. Cayeron también
buenas versiones de “Alborada”, mucho mejor en directo, y “El viejo torreón”.
De clásicos simplemente “Levántate y anda” que quedó perfecta y “Madre Tierra”
fue un final agridulce e inesperado. Apenas llevaban una hora y diez sobre
las tablas cuando se abrieron las luces y aparecieron las dos bandas para
despedirse.

Entiendo que Lage y Rionda quieran potenciar su nueva etapa, pero olvidar
sus dos primeros trabajos me parece un pecado. Mucho fan del grupo les apoya
desde La llama eterna y Llanto de un héroe, y el hecho de olvidarlos decepcionó
a muchos de los presentes. El poco minutaje sobre las tablas y un set-list
mejorable (a mi modo de ver, claro está) fueron la cruz de una velada que
nos dejó insatisfechos a la mayoría. Fue un gatillazo placentero que pudo
haber sido una noche inolvidable.

La enorme oferta de bandas, conciertos y demás está perjudicando a la escena
metal. Si además de todo esto añadimos divisiones entre bandas formadoras
de subgrupos que hacen posicionar al fan, llegamos a la estúpida conclusión:
¿Divide y vencerás?, el dicho será cierto en todos los ámbitos excepto en
el metal. Como siempre somos la excepción que confirma la regla.

Jordi Tàrrega

Datos:

Lugar : RAZZMATAZZ II

Barcelona

Promotor : ROCK’N’ROCK

Día:25/05/2003

Puntuación:8