Ice Nine Kills: The Silver Scream

“The Silver Scream” es el disco definitivo de Ice Nine Kills, la evolución perfecta de “Every Trick In The Book” que se convierte en todo un regalo para cualquier aficionado al metal y al terror. Una colección de grandes y variadas canciones que rinden homenaje a alguno de los mayores iconos del género, con unas composiciones y una producción mimada al detalle, y que, por sino fuera suficiente, presenta sus canciones en unos videoclips en forma de cortometrajes que destilan amor y respeto hacia sus referencias.

Tenemos que remontarnos más de una década atrás en el tiempo para encontrar el origen de los estadounidenses Ice Nine Kills, un proyecto que nació de la unión de un par de amigos de instituto, Spencer Charnas y Jeremy Schwartz, grabando un álbum independiente, “Last Chance To Make Amends” y un EP, “The Burning”, que les dio cierto nombre dentro de la escena alternativa.

Poco después Schwartz abandonaría la formación, con lo que Spencer Charnas, vocalista y frontman de la banda reclutaría algunos viejos conocidos y comenzaría a dar forma a lo que hoy conocemos. Metalcore con un importante componente teatral (también llamado theatricore) y claras influencias del emo, el rock alternativo y el heavy metal.

En su camino desde entonces y hasta la fecha nos han dejado tres discos de estudio, un prometedor “Safe Is Just A Shadow” que ya mostraba su potencial y que ha sido regrabado recientemente, “The Predator Becomes The Prey” y “Every Trick In The Book”. Este último es un álbum conceptual que recoge algunos clásicos de la literatura gótica y de terror como “Drácula”, “Dr. Jekyll and Mr Hyde” o “El Exorcista”.

Metal que traspasa la pantalla

Ahora sí, llegamos a su nueva obra, “The Silver Scream”, un nuevo disco conceptual en el que esta vez cada canción encuentra su fuente de inspiración en una película de terror, aportándole aún, si cabe, un mayor componente cinematográfico a su propuesta musical. Probablemente la producción de Drew Fulk (Motionless In White o Bullet For My Valentine) también ha contribuido enormemente a esa madurez sonora e impecable presentación.

El festival del horror comienza de la mano (o mejor dicho, del guante) de “The American Nightmare” con Freddy Krueger y su “Pesadilla En Elm Street” como grandes protagonistas de la función. Un arranque potente y vertiginoso arranque con las guitarras de Justin DeBlieck y Justin Morrow alimentando la agresividad que escupen las cuerdas vocales de Spencer Charnas, quien encuentra su vertiente más melódica durante el estribillo de la canción. ¡No os durmáis que esto acaba de comenzar!

Siguen la misma línea con “Thank God It’s Friday” y Jason Voorhees como estrella invitada, trasladándonos al mismísimo campamento de Crystal Lake de la saga “Viernes 13”. Aquí seremos víctima de sus aplastantes versos y la contagiosa melodía de sus estribillos, con un puente brillante y unos breakdowns con multitud de arreglos terroríficos que nos invitan a traspasar las fronteras de la música uniéndola con la del séptimo arte.

El inquietante sonido del tick tack de un reloj que nos anuncia la llegada de “Halloween” y que hubiera firmado el propio John Carpenter nos introduce en el que quizás sea el mejor tema del disco, con un registro vocal por parte de Charnas de un equilibrio perfecto entre el scream y la melodía, siempre con la ayuda de DeBlieck. Si además le sumamos uno de los mejores estribillos y unos inesperados y violentos cambios de ritmo se me ocurren pocas formas mejores de rendir tributo a Michael Myers.

Dejamos por unos minutos la agresividad para sumergirnos en unos derroteros más pegadizos, melódicos y rockeros, de sabor post-hardcore, en “Savages”. Aquí el film elegido es la mítica “La Matanza De Texas” y las armonías de guitarra ganan protagonismo junto a un estribillo repetitivo que se apodera de tu cabeza sin remedio alguno. Imposible no cantar sin parar “We are the savages, eating you alive, the original, villains in the night” y recrear ese ambiente sucio, malsano y enfermizo de la América profunda de los 70 que tan bien supo plasmar Tobe Hooper en su día.

Vuelven a su fórmula habitual con “The Jig Is Up”, alternando pasajes de lo más agresivos con melodías más agradables para el oído y de naturaleza pegadiza. Quizás no es de lo más brillante del álbum pero la guitarra de Randy Strohmeyer (Finch) aparece como primera colaboración y las melodías nos acercan al mundo cinematográfico de la saga “Saw”, de forma tan inquietante como en las películas.

Invitados a la orgía del horror

Su single más reciente se deja ver con “A Grave Mistake”, una tierna, emotiva y rompecorazones composición sencillamente brillante e ideal para sonar en cualquier emisora de radio. Unas preciosas melodías que explotan en un estribillo marca de la casa para acercarnos al personaje de Eric Draven, más conocido como “El Cuervo” y que funciona a la perfección como perfecto híbrido de la mejor versión de Avenged Sevenfold o los primeros Thirty Seconds To Mars. No tengo ninguna duda de que al Jared Leto de aquel maravilloso “A Beautiful Life” le habría encantado firmar un tema como este.

Recuperan el estilo de sus inicios fusionándolos con los actuales al ritmo de “Rocking The Boat”, un puñetazo de metalcore con un invitado muy especial, Jeremy Schwartz, miembro fundador de la banda al que hacíamos mención en los primeros párrafos de la crítica. Una ventana abierta al pasado para contarnos su historia sobre la maravillosa “Tiburón” de un joven Steven Spielberg que ha quedado para la posterioridad en la historia del cine fantástico.

Aunque para colaboraciones especiales la que tenemos en “Enjoy Your Slay” con Sam Kubrick. ¿Os suena el apellido? Correcto, se trata del nieto del cineasta Stanley Kubrick, quien es vocalista de su propia banda, Shields”, y que aquí contribuye, como no podría ser de otra forma, con un homenaje a “El Resplandor”. Un nuevo trallazo del mejor metalcore con unos riffs de guitarra brutales, una aplastante batería a cargo de Conor Sullivan y un repertorio de matices sonoras que conforman una ambientación única.

Experimentan con sus diversas influencias en “Freak Flag”, coqueteando con los elementos electrónicos, los riffs más eléctricos y efectos sonoros en la voz de Charnas que les acercan a propuestas musicales más vanguardistas como las de Motionless In White. Un homenaje a todos esos freaks tan frecuentes en el cine y otras disciplinas del horror del cual uno de los grandes abanderados es el señor Rob Zombie y sus “Los Renegados Del Diablo”.

Los tiempos en los que estuvieron más cerca del post-hardocre y sonidos más alternativos vuelven a florecer durante “The World In My Hands”, un corte en honor al “Eduardo Manostijeras” de Tim Burton. El registro más melódico de Tony Lovato (Mest) a las voces alimenta la faceta más amable de Spencer Charnas, al que se une uno de los solos de guitarra más limpios y estéticos por parte de DeBlieck. Bajan las revoluciones y la mala leche pero sigue intacta sus cotas de calidad mostradas en este trabajo.

Cuando hablábamos de la faceta más teatral del grupo y del propio Charnas nos referíamos a ejemplos como el de “Merry Axe-Mas”. Aún queda un tiempo para navidad pero nunca es demasiado pronto para recuperar otro de los clásicos del cine de terror como “Noche De Paz, Noche De Muerte”, en el que probablemente sea su corte más heavy metal. Los riffs de guitarra más propios del thrash se funden con los breakdowns más salvajes del metalcore, en un cruce casi perfecto entre Pantera y Parkway Drive.

Nos sorprenden en la balada del álbum, “Love Bites”, que si bien puede resultar un corte más facilón, comercial y menos arriesgado que el del resto del disco, posee los suficientes ingredientes para hacerlo muy interesante. Comenzando por el precioso dueto que nos ofrecen Spencer Charnas y Chelsea Talmadge, a la que conocemos por su trabajo en la exitosa serie de televisión “Stranger Things”, y terminando por su inspiración en la clásica y ochentera “Un Hombre Lobo Americano En Londres” de John Landis.

¡Tú también flotarás!

Y la joya de la corona viene, como en las mejores películas, en su parte final. “IT Is The End” es la perfecta orgía musical de cualquier fan del universo de Stephen King, Pennywise y, obviamente, “IT”. Un espectáculo sonoro (y ojalá lo veamos pronto en visual) entre el pequeño Georgie y nuestro payaso favorito, con un Charnas en estado de gracia, mostrando todo lo mejor de si mismo (que es mucho) con la ayuda del ska punk de Less Than Jake y las melodías pop de Fenix*TX. Un fin de fiesta por todo lo alto con una banda pletórica y un trabajo de estudio espectacular que nos hará flotar.

“The Silver Scream” es el disco definitivo de Ice Nine Kills, la evolución perfecta de “Every Trick In The Book” que se convierte en todo un regalo para cualquier aficionado al metal y al terror. Una colección de grandes y variadas canciones que rinden homenaje a alguno de los mayores iconos del género, con unas composiciones y una producción mimada al detalle, y que, por sino fuera suficiente, presenta sus canciones en unos videoclips en forma de cortometrajes que destilan amor y respeto hacia sus referencias. Apagad las luces, subid el volumen de vuestro equipo y preparad un buen bol de palomitas para disfrutar en todo su esplendor de una obra de este calibre. ¡Esto es “The Silver Scream”!