El lanzamiento en formato físico del soundtrack de ‘Clark’ coexistirá como una joya de auténtica colección. La serie sueca de Netflix es un thriller con una dosis de farsa dirigida por Jonas Åkerlund basada en el libro del propio protagonista, Clark Olofsson. La banda sonora la publicó Milan Records y pone música a esta fantástica miniserie que consta de seis capítulos, la cual ha sido lanzada el pasado cinco de mayo.
Magia Hipnótica
El álbum tiene esa magia hipnótica que solo le podría imprimir alguien como Mikael Åkerfeldt, es un disco que se puede escuchar una y otra vez sin titubear. Es de esos discos que cada que se le da una nueva repasada, se le manifiesta un nuevo matiz o una nueva sensación de disfrute musical.
Desde el primer track (“Libertine Theme”) se deja ver ese trabajo placentero y la intención de Mikael Åkerfeldt de llevar a los oyentes por un tour de estilos musicales totalmente cambiantes y disímiles, pero en una convivencia demasiado encantadora. La música viaja por la psicodelia sesentera hasta las melodías con influjos del medio oriente, se nota que el experimento le sirvió al musico sueco para introducirse en cosas más frescas, menos pesadas, se puede detectar cosas indie; pero también se puede disfrutar un chill out y un jazz fresco, de esos que podrías poner en una buena cena con un buen vino.
Belleza Melódica
Innegablemente hay resplandores del rock progresivo, era una obviedad que para contar la historia de locura de Clark Olofsson se debía construir un sonido de acuerdo al personaje, para ello Mikael Åkerfeldt supo en que tracks y en qué momentos meter su dosis del rock progresivo que tan bien dominado tiene.
Ciertamente la mayor parte de las canciones son de un promedio de dos minutos e instrumentales. Pero Mikael Åkerfeldt consigue dejar su huella con su emblemática voz y presencia en tracks como “Battle For Love” o en la brillante “Måndag i Stockholm”, respaldado por su música y espacios logrados a cada segundo.
La música de Opeth, más en específico, de Mikael Åkerfeldt nunca ha conservado los formatos clásicos de composición y, si hubiera que decir que suena a algo en específico, se tendría que indicar o definir como rock progresivo sumamente inteligente y por demás arriesgado. En ‘Clark’, el musico y compositor, demuestra que no es un novato en la materia y deja este gran trabajo como un objeto de culto para muchos seguidores de su banda y los fanáticos de la música de películas y series.
La belleza melódica durante todo el disco y los ambientes forjados por Mikael Åkerfeldt, aunados a la particular forma de expresar su arte, que va y viene en tonos y figuras sorprendentes; lo hacen un trabajo extraordinario, de esos que hasta da miedo tanta perfección.
Mikael y la producción de la serie dejaron que la música fuera un idioma para llegar a todas las latitudes y emprendieron un viaje alucinante, repleto de texturas sonoras; con sonidos etéreos, tan etéreos que desde las primeras notas te harán sentir como un Dante de la mano de Virgilio que desciende hacia las profundidades del infierno musical.