TEMPESTT + JEFF SCOTT SOTO

Después de la visita de TALISMAN haciendo su gira de despedida en mayo del año pasado, un servidor había perdido bastante la fe en Jeff Scott Soto. El vocalista, siempre entregado al 100%, parecía apático, menos arrollador de lo habitual y –en definitiva- el show fue un show para olvidar. Pero no podía ser que Soto estuviera comportándose así sin motivo aparente. Pocos días después se supo que Soto había sido eliminado de los planes de futuro de JOURNEY, su banda favorita, para la que había comenzado a ser vocalista unos meses atrás en uno de esas vueltas de la vida que uno no se espera.

El Soto de verdad, el que todos conocemos, vuelve a estar en los escenarios. Lo demostró hace unos días en una visita algo distinta a las que suele hacer. Si habitualmente Soto siempre ha aparecido en nuestras tierras al frente de TALISMAN o de su banda en solitario (o SOUL SIRKUS, o JOURNEY, o…) en ésta ocasión su presencia era más especial que en otras ocasiones. Venía a España junto a la banda brasileña TEMPESTT, un grupo de hard rock que había abierto para Soto hace algunos años en tierras cariocas. Soto seha decidido a apoyar a la banda y para ayudarles a generar interés en toda Europa, se ha currado una extensa gira de un mes a lo largo y ancho del continente en la que TEMPESTT han presentado sus temas, Soto ha colaborado con ellos, ha desgranado rarezas y todos selo han pasado bien en escena.

En el caso de Barcelona no hubo diferencia con el planteamiento original de Soto, según el cual cada concierto iba a ser una fiesta. Efectivamente lo fue, pese a la reducida cantidad de personas que asistió a la cita (menos de cien en un Apolo 2 que parecía demasiado grande para la ocasión y todo…). Pero Soto es un profesional de aquellos a los que poco importa que haya 10 o 10.000 personas delante: la cuestión es hacer un gran show y que todo el mundo se vaya a casa con una sonrisa en la cara. Y así fue.

Alrededor de las 21:45, TEMPESST salieron a escena. La banda brasileña está formada por el joven Edu Cominato a la batería, Gustavo Barros a la guitarra, Paulo Soza al bajo y B.J. a la voz. Hacen un hard rock metalizado muy competente, y juegan con la baza de tener un gran vocalista que realza (y mucho) las canciones de la banda como es B.J. Acaban de editar un disco debut titulado “Bring ‘Em On”, del cual hicieron uso extenso en el show, tocando canciones como el tema título, “Lose Control”, “Too High”, Faked By Time” o “Fallen Moon”, entre otras. Durante la primera parte del show la banda también ejecutó un “Burn” de DEEP PURPLE que siempre se agradece para terminar de calentar a un público que se enfrenta a canciones probablemente nunca antes escuchadas, por lo que la familiaridad es escasa. Al poco tiempo, tras unos cuarenta minutos de show, apareció en escena Jeff Scott Soto comenzando el festival del humor que se puede esperar del tipo en situaciones como ésta. Se metió con los miembros de TEMPESST y provocó unas cuantas risas para acto seguido adueñarse del escenario y compartir junto a B.J. el tema en el ambos hacen un dueto y que también aparece en el disco delos brasileños: “Insanity Desire”. El tema – puente sirvió para que Soto tomara las riendas del show y TEMPESST pasara a ser su banda de apoyo. A partir de aquí, el show pasó a ser la fiesta prometida, aunque Soto fue a por lo seguro para afianzar su posición en el escenario, pues rapidamente sonaron “Eyes Of Love”, “Color My XTC”, la esperada versión de “Crazy” de SEAL y el clásico “Stand Up And Shout” de la banda sonora de la película “Rock Star”. En ese momento, Soto ya estaba completamente mojado en sudor, mientras Paulo Soza hacía auténticas virguerías con el bajo para demostrar su valía. Y es que Soto, dado su evidente gusto por el funk, siempre sabe rodearse de grandes bajistas, sea cual sea la situación. Algo más graciosa era la situación del vocalista B.J., que se encontraba más al fondo en el escenario (que tampoco es que fuera un escenario enorme…!) ante un pie de micro, colocado con los brazos como si de una taza se tratara y apoyando harmonías y coros, además de desmelenarse con algún dueto casual junto a Soto.

Jeff advirtió al público de que habría algunas sorpresas en forma de canciones que pocas veces han sonado en directo y así fue: “Tears In The Sky”  y “Livin The Life” cerraron la parte del show dedicada a Soto en exclusiva, no sin antes sorprender al público con una excelente versión de “Panamá” de VAN HALEN. También hubo tiempo para un gracioso incidente con un miembro del público que se encaró con Soto en un alarde de mal rollo realmente extraño en un concierto así. Antes de “Tears In The Sky”, Soto bromeó diciendo que en el tema no había que hacer caso a la guitarra sinó a él, o algo por el estilo. Un tipo del público le espetó de muy malos modos que “tu no importas, la batería es el verdadero alma del heavy”. Una estúpidez total y absoluta. Pero Soto se lo tomó a broma y dio a entender desde el escenario que el tipo estaba como una cuba, lo cual es una opción con bastante peso. Alguien que espeta a gritos en un concierto de aforo reducido una frase tan peregrina como esa merece ser condenado a leerse la sección de cartas de lectores de la Heavy Rock durante toda la eternidad.

Por último, Soto tuvo la deferencia de presentar un tema de su próximo disco de estudio en solitario, que – según dijo – lleva hecho desde Enero pero no aparecerá hasta septiembre como mínimo. El tema, titulado “21 St Century” tiene un toque algo más moderno en el riffing, aunque en esencia sigue siendo Jeff Scott Soto. No obstante, si el disco completo es como el tema escuchado, que nadie se espere “Prism Part II”, porque no lo será. Pero siendo Soto, estoy seguro de que no defraudará a nadie.

En lineas generales, una noche divertida de miercoles, con un gran vocalista haciendo un show algo inusual junto a una banda de prometedores talentos que buscan en Europa la oportunidad que tanto costará encontrar en tierras brasileñas. Un diez para Soto por echarles una mano.