SKUNK D.F. + THE BAND APART

La última noche de Enero de este año, la noche del sábado, se presentaba especial. SKUNK D.F ponía el cierre a la gira del que, al menos para mí, fue uno de los mejores discos del año 2007, «Esencia». Y lo hacía de nuevo con una sala Caracol abarrotada, dejando fuera (por desgracia) a varias decenas de personas sin entrada, con algunas sorpresas muy interesantes, con la presentación en la capital de Xavi Igual (David Ramos ya lo hizo en el concierto de Mayo en Gruta 77), y sobre todo, y como siempre, con muchísima calidad.

La noche empezaría con THE BAND APART sobre el escenario. Aunque en principio su estilo no encajara para nada con el grupo al que teloneaban, a ellos pareció darles igual, y salieron a por todas. Aquello parecía casi un partido de baloncesto, con sus componentes en pantalón corto de deportes, sin parar de saltar, de moverse y de hacer el loco; pero cumpliendo con la tarea musical. «Death Can Dance» es un disco brutísimo e intenso; y con ellos se cumple la máxima de que es sobre un escenario donde se ve la talla real de los grupos, ampliando toda esa intensidad ante un público que se mostró en su mayoría bastante pasivo, exceptuando un pequeño sector), hasta que Glam, su vocalista, incitó a un amago de Wall of death que quedó en un pequeño mosh-pit. Ya tendrán oportunidades mejores de demostrar su valía ante un público más acorde a su estilo.

Pero es que estaba claro que la inmensa mayoría estaba allí por SKUNK D.F. A pesar de las trabas y envidias que han tenido en su camino, a pesar de los cambios de formación, e incluso de como está ultimamente el negocio musical, ellos han sabido superar cualquier problema para llegar donde están ahora. Y están, sin duda, en el mejor momento de su carrera, le pese a quien le pese esa afirmación. Porque sí, quizá mucha gente pueda echar en falta algo de la intensidad de sus inicios, pero es ley de vida la evolución, y sobre todo, la madurez, ya que nadie ve las cosas de igual manera ahora que hace diez años; y quien lo haga, vive del pasado.

Ellos no lo hacen, pero a pesar de eso, parecen volver atrás en el tiempo, y empezar el concierto con «Ultima Oportunidad», ante la locura del público tras la retirada del telón. Aquello fue un repaso a sus mejores temas, a todos los clásicos, unidos a los mejores de «Esencia», junto a un pequeño adelanto de lo que será su próxima obra, en forma de tres temas. Siguió «Himen», con el público su comienzo, siendo esto algo habitual durante todo el concierto, cediendo Germán el protagonismo atoda esa gente que, incluso en un buen número, venían de diferentes partes de España para sentirse partícipes de un concierto, como dije más arriba, especial.

La «Esencia» de SKUNK D.F. estuvo presente en el tramo central con «Lucha Interior»,»Muerte y Destrucción» y «Eternidad», pero intercalados con grandes clásicos como «Carpe Diem», «Ícaro», «En Cinco Minutos»… Tampoco faltaron unidas, como suele ser habitual, «Este Dolor» y «Musa». De lo que uno se da cuenta en un concierto suyo, es de la evolución brutal que han tenido las letras del grupo. Mucho más personales, y con libre interpretación asu significado. Con esto no menosprecio su material más antiguo, pero está claro que la madurez del grupo se basa en unos cimientos más que sólidos, que son las letras de Germán, que en directo, más que cantarlas, las interpreta. Si a él se añade alguien como Pepe Arriols, y encima con cada cambio de miembro han evolucionado más, buscando siempre lo mejor, estamos ante uno de los mejores grupos de rock/metal de la actualidad. El dinamismo del que hacen gala sobre el escenario, la movilidad de todos ellos (increíble la fenomenal adaptación tanto de David, aunque este ya lleve unos cuantos meses más, como de Xavi, y sobre todo, la humildad y cercanía fuera del escenario, los hace distintos, y vuelvo a repetir, especiales.

La mano de sus nuevos componentes, de hecho, ya se ha hecho notar en sus nuevas composiciones. «En Noches Como Esta» Germán vuelve a demostrar el don que tiene con las letras, pero en «Decreto Ley» el peso recae sobre las guitarras, con un riff rápido que se queda en la cabeza desde la primera vez que se escucha.Para el final de esta parte del concierto, contarían con la grande (en todos los sentidos) colaboración de Markhos, cantante de HOLLOW, el otro grupo de Xavi Igual. Pero aún quedaba mucho por decir. Quedaba hacer un «Manifiesto», decir «Adios» al público con otro tema nuevo, más íntimo, y encarar la recta final con «Supernova» y «Circvs», porque al fin y al cabo, eso es lo que es la música a veces, un circo.

Espléndido futuro el que tienen por delante el grupo madrileño. Con una fiel tropa de seguidores, con unos cambios que han mejorado al grupo, con unos temas que prometen hacer del nuevo disco, de nuevo, uno de los mejores del año, y con momentos tan especiales como los que hacen pasar, solo queda esperar que llegue el momento. Porque llegará.