“No inventan nada ni son los más técnicos del mundo”. La misma frase se podría aplicar para las dos bandas que actuaron en la sala Arena la pasada fría noche de Noviembre; unos con una salvedad para bien, los otros no tanto.

Noviembre ha sido un mes plagado de oferta de conciertos de todo tipo, y a pesar de estar en sus últimas fechas, la visita de SEETHER a España era esperada, consiguiendo llegar a más de media entrada. Cuál fue mi sorpresa al enterarme poco antes del concierto que los teloneros eran una de las promesas del hard rock del Reino Unido, HEAVEN’S BASEMENT. Y por mí, podían haber seguido tocando más de la escasa media hora que pudimos disfrutar de ellos. Ya en la prueba de sonido se las prometían, arrancándose con las primeras notas de ‘Ain’t Like That’ de ALICE IN CHAINS. ¿Qué si suenan a ellos? Pues las guitarra de Sid Glover puede que recuerde en alguna ocasión, pero en otras es mucho más macarra pero igual de noventera, deudora de SKID ROW, mientras que en otros temas nos transportan a los GUNS N’ ROSES más auténticos o a los BACKYARD BABIES DE ‘13’. Y sobre el escenario sobran las palabras, porque son una apisonadora. ¿Lo mejor de todo? Que aún no han sacado su disco de debut; ‘Filthy Empire’ verá la luz el mes de Febrero y en su carrera sólo tienen un par de EPs y un single de adelanto, ‘Fire, Fire’, pero son más que suficiente para poner todo patas arriba. Alternaron el mencionado single y algún tema que irá en ese primer álbum, como ‘I am Electric’, ‘Nothing Else to Lose’ o ‘Executioner’s Day’ con temas antiguos como ‘Reign On My Parade’ y la inicial ‘Unbreakable’. Actitud y rock hecho con ganas, clase y muy buen gusto, el futuro que tienen por delante parece espectacular, y la próxima vez que vengan por aquí estoy convencido de que ya tendrán un reconocimiento más que merecido.

  • Unbreakable
  • Can’t Let Go
  • Fire, Fire
  • I am Electric
  • Nothing Left to Lose
  • Reign on my Parade
  • Executioners’ Day

Después de un concierto tan dinámico, el ambiente se enfrió una barbaridad. Quizá es que no encajaban demasiado dos piezas tan distintas como el hard rock enérgico de unos con el rock alternativo que bebe del grunge oscuro de los otros. Sea como fuera, la primera sorpresa fue ver como retrasaban los monitores de cada músico un par de metros, ocupando solo la mitad trasera del escenario, negando el trato y el calor del público, que al fin y al cabo la mayoría estaban allí para ver al trío sudafricano. El segundo inconveniente se pudo ver desde los primeros acordes de ‘Gasoline’, y es que la luz iba a ser entre nula y escasa a lo largo de la mayor parte de su actuación. Si lo añadimos a la lejanía que mostraba la banda, y a que era complicado ver (y sacar en una foto) la cara Shaun Morgan, pues tendremos que creernos que era él; a las pocas fotos que ilustran esta crónica me remito. Pero sí, lo era, porque su registro a lo Kurt Cobain es inconfundible. Hace un tiempo, cuando los descubrí, leí un comentario sobre ellos (siento no recordar quién lo dijo) que decía que sonaban más a NIRVANA que los propios NIRVANA. Y es una sombra alargada que siempre les acompañará, igual que ocurrió con BUSH y SILVERCHAIR (aunque los segundos, con su giro musical, consiguieron quitarse la etiqueta); si añadimos que no es extraño verles tocar (que no versionar) temas de ellos, pues seguirá acompañándoles ese parecido más que razonable; al menos en este ocasión lo dejaron de lado para tocar ‘Change (in the House of Flies)’ de DEFTONES cerca del final de su actuación.

La interacción de los teloneros contrastó por completo con la frialdad de SEETHER. Los temas iban cayendo, ‘Needles’, una espectacular ‘Fine Again’), ‘Driven Under’… pero unos simples “thank you” fue lo máximo que pudimos escuchar. De acuerdo, no son la alegría de la huerta, y la melancolía de muchas de sus composiciones pega con ese ambiente, pero uno ha visto ya tantas cosas en directo que no sabe que pensar. La fama por aquí (tanto en España como extensible a Europa) les vino con el dúo entre su vocalista y Amy Lee para ‘Broken’; y a día de hoy, muchos siguen sin saber que la canción estaba hecha sin ella, y fue simplemente regrabada aprovechando la relación entre ambos y el tirón que tuvo en su momento EVANESCENCE, cuando pegaron el pelotazo con ‘Fallen’; supieron coger el tren que pasa una sola vez en la vida. Y dicho sea de paso, fue uno de los mejores momentos de su actuación, con Dale Stewart tocando la guitarra; no sería el único momento, ya que hizo lo propio con una acústica para ‘Country Song’. Tampoco se entiende mucho que un grupo de este estilo se guste en un solo de batería… prescindible, cuando puedes meter uno o dos temas más a tu set, ¡será por buenas canciones que tienen! Más lógico era que para ‘The Gift’ se quedara a solas Shaun, aumentando su sentimiento. Tras ella, la citada ‘Change’ y recta final con ‘Fake It’ y ‘Remedy’ y una sensación agridulce. La sensación de que por allí pasó un grupo a comerse el mundo (y tiene pinta de que lo van a conseguir) y otros entre tinieblas y sin hacer mucho ruido. Al menos, nada que objetar a su sonido; un diez para unos, y menos nota para los otros.

  • Gasoline
  • Needles
  • Fine Again
  • Driven Under
  • 69 Tea
  • Here and Now
  • Broken
  • Drum Solo
  • Fur Cue
  • Rise Above This
  • Tonight
  • Country Song
  • The Gift
  • Change (Deftones cover)
  • Fake It
  • Remedy

Varo ( varo@themetalcircus.com )

Promotor:Last Tour International

Asistentes:500

Día:27/11/2012

Sala:Arena

Ciudad:Madrid

Puntuación:7