¿Se podría decir que hemos estado frente el concierto folk metal del año? Sin dudarlo. Quizá esté también entre las mejores giras del género que han pisado nuestro territorio en estos últimos años. Venga, va, me lanzo y reivindico que una gira de folk metal también puede entrar en el Top 5 de mejores conciertos del año, ahora ya hablando de todos los subgéneros del metal. Porque más allá de una panda de “felices borrachuzos hippies” (y sólo hace falta escuchar a Moonsorrow para ver que ni siquiera esto es completamente acertado), entre el folk también hay muchas bandas con mucha calidad, mucha preparación y, sobre todo, mucha conexión con el público, y una capacidad de hacer gozar a aquellos que les dan la oportunidad que justifica que, año tras años, de sus conciertos sólo salga gente sonriendo de oreja a oreja. Y eso, creo, es importante.