Las comparaciones con Black Sabbath y la etiqueta de “doom” se estaban comenzando a quedar pequeñas para el potencial de la banda de J.D. Cronise y cia.

El nuevo disco de The Sword es, en lineas generales, un punto y aparte en la carrera de la banda de Texas. Después del laureado “The Apocryphon” de 2012, la banda estaba en ese punto el cual necesitaban dar otro gran paso hacia adelante -pese a que su sonido siempre vaya, técnicamente, hacia atrás. Las comparaciones con Black Sabbath y la etiqueta de “doom” se estaban comenzando a quedar pequeñas para el potencial de la banda de J.D. Cronise y cia. Así pues, con “High Country” la banda ha dado una importante vuelta de tuerca a su sonido, haciéndolo un poco más aperturista y mostrando influencias que son más cercanas a Thin Lizzy y ZZ Top que a los mencionados Sabbath o a Sleep. Tampoco es que se hayan vuelto los Queens of the Stone Age de “Songs for the Deaf” pero si eres nuevo en el mundo de The Sword, “High Country” es un punto de partida mucho más digerible que, por decir algo, “Warp Riders”.

La banda explota tanto su lado más proto-metalero como las influencias del rock más clásico. Es obvio que quien les comparan con Led Zeppelin se pasan un poco de largo en lo que a la propia música se refiere. No obstante, lo que ambas bandas tienen en común es el aura de misterio de su música. Nunca sabes por donde te va a salir un tema de The Sword. En este nuevo trabajo tan pronto son rocosos y áridos en “Tears Like Diamonds”, como psicodélicos en “Agartha”, como heavy metal setentero en “Suffer No Fools”.

Los números más bluesies, caso de “Mist & Shadow”, gozan de contrastes tremendos entre luz y oscuridad que los hacen ideales para el directo. Otros, como la instrumental “Silver Petals”, colorean el disco desde una paleta de lo más cálido, mostrando el lado más inspirado de la banda. Pero es cuando The Sword se ponen más macarras (“Ghost Eye” siendo el mejor ejemplo) cuando la banda brilla con luz propia. El groove sobre el que cabalgan las canciones es innegable y hace que tus pies se muevan involuntariamente.

Está claro que la tendencia retro del rock and roll actual puede ser tremendamente cansina y forzada, pero bandas como The Sword, The Black Keys, Graveyard o Kadavar -cada una desde su particular posición- consiguen que lo añejo suene fresco, a la par que demuestran que una buena fórmula es válida tanto en 1971 como en 2015.

Grupo:The Sword

Discográfica:Razor & Tie

Puntuación:9

Canciones:

  1. 01. Unicorn Farm
  2. 02. Empty Temples
  3. 03. High Country
  4. 04. Tears Like Diamonds
  5. 05. Mist and Shadow
  6. 06. Agartha
  7. 07. Seriously Mysterious
  8. 08. Suffer No Fools
  9. 09. Early Snow
  10. 10. The Dreamthieves
  11. 11. Buzzards
  12. 12. Silver Petals
  13. 13. Ghost Eye
  14. 14. Turned To Dust
  15. 15. The Bees of Spring

Año:2015

Votación de los lectores:5