Lordi aumenta su épica en Barcelona

Después de sus exitosos shows tanto en Madrid como en Valencia, llegó el turno para que en la ciudad Condal se pusiera punto y final a la gira española de Halloween patrocinada por los monstruos favoritos del hard rock, los finlandeses Lordi, acompañados de dos muy sólidos y muy diferentes proyectos entre sí, pero que hicieron vibrar el escenario a lo grande, Dymytry y Almanac.

Parece una eternidad aquel show que brindaron los finlandeses en tierras catalanas hace más de dos años, ya que aquel concierto en la sala Razzmatazz 2 un primero de marzo de 2020, marcó el último show de heavy metal en la ciudad por un buen tiempo ya que quince días después el gobierno español activaría el estado de alarma que dejó al país en cuarentena y sin espectáculos por lo que pareció una eternidad.

Teloneros que dan la talla

La noche pintaba muy bien desde el inicio ya que estaría caracterizada por una gran diversidad de géneros musicales y, con el honor de abrir la velada, llegaban desde Praga los checos Dymytry, una muy interesante propuesta de nu metal junto con metalcore que ellos mismos denominan psy-core.

Dymytry (Foto: Julia Martínez)

No pareció importarles su lugar en el repertorio de la noche ya que lograron darse a conocer desde el inicio con una muy sólida ejecución y un gran frontman, Jan Macku, quien hizo que los asistentes no pudieran evitar compararlo por breves instantes con un Corey Taylor que, por muy loco que suene, logró sellar su imprenta entre el respetable que gozó de canciones como “Hope” o “Touchdown”. Para cerrar su presentación, invitaron al escenario a Victor Smolski de Almanac para tocar un muy logrado cover de “Somebody’s Watching Me” de Rockwell, canción que fue popularizada por Michael Jackson. Actuación sobresaliente por parte de los checos que lograron hacer crecer su familia de seguidores en tierras catalanas.

Dymytry (Foto: Julia Martínez)

Antes de bajarse de la tarima, Víctor le pidió al público que esperase cinco minutos únicamente para poder subir al escenario de nuevo y, literalmente después del tiempo prometido y sin un minuto más, llegaba el turno de disfrutar de Almanac, el proyecto del bielorruso Victor Smolski quien fue el guitarrista de la banda alemana Rage desde 1999 hasta el 2015. Smolski es conocido en el mundo artístico por ser un guitarrista virtuoso que aparte de sus trabajos en el heavy metal, ha colaborado con filarmónicas a nivel mundial, especialmente la de Barcelona, donde el guitarrista ha grabado dos de sus álbumes de estudio.

Almanac (Foto: Julia Martínez)

Esta vez llegó con un proyecto instrumental de guitarra, bajo y batería que por supuesto está caracterizado por su gran habilidad con el instrumento y la inmensa rapidez en su ejecución, donde presentó temas tanto de sus álbumes en solitario como canciones de su pasado por Rage del calibre de “Soundchaser” y para regresar el favor anterior, Víctor llamó al escenario al cantante de Dymytry para hacer sonar “Down”, una de la canciones más conocidas del grupo alemán del cual Smolski formó parte.

Almanac (Foto: Julia Martínez)

“Beauty” cerró tanto el tridente de canciones de Rage como la grandiosa presentación del proyecto Almanac. Lordi ha decidido de manera muy acertada escoger los teloneros que los acompañan en esta gira debido a que cuentan con muchísima calidad musical y sin duda, se marcaron presentaciones de notable alto.

Lordi no defrauda con su monstruosidad

Era hora del plato fuerte de la noche, Lordi, que fue servido a las 21:00h exactas y que empezó con la mítica “God Of Thunder” de Kiss, cosa que solamente podía significar una cosa, Mr. Lordi estaba a punto de asaltar la sala Salamandra junto a Kone, Hiisi, Mana y Hella. “Abusement Park” le daba el inicio al show de los finlandeses, los cuales venían con ganas de entregarlo todo y así lo demostraron al sacarse de la manga como segunda canción la excelente “Would You Love A Monsterman”.

Mr. Lordi se mostró muy comunicativo con el público, burlándose de sí mismo por tener que solicitar que alguien de su staff le colocara las letras de las canciones debajo de los monitores. A su vez indicó que durante la pandemia la banda sacó siete álbumes de estudio, por lo cual el show estuvo cargado de canciones pertenecientes a sus nuevos trabajos discográficos.

Lordi (Foto: Julia Martínez)

Como era de esperarse, el público disfrutó de un show muy divertido y temático, al puro estilo de Alice Cooper. Corazones siendo desgarrados de pechos, cyborgs que tenían que ser revividos, discos de bombo de batería que giraban sobre su eje, sierras que echaban sangre al público, entre otros. Todo esto acompañado de su más novedoso repertorio con canciones del estilo de “Carnivore”, “Abracadaver”, “Borderline” y “Down With The Devil”.

Lordi (Foto: Julia Martínez)

Llegó el momento de la controversia, la cual obviamente fue advertida también por Mr. Lordi ya que cuando la banda lanzó al mercado sus nuevos discos durante la pandemia, lanzaron un sencillo de música disco el cual no obtuvo buena recepción por parte de la crítica. Aquello pareció no importar en lo absoluto ya que “Believe Me” fue una de las canciones que más disfrutó y bailó el respetable.

Lordi (Foto: Julia Martínez)

El concierto estaba por terminar pero obviamente tenían guardado lo mejor para el final. Después de un solo de guitarra muy temático pero cargado de mucha clase, deciden bombardear con el primero de los tres trallazos finales. “Devil Is A Loser”, una canción extremadamente enérgica que fue coreada por todos los asistentes para después tener un merecido respiro ya que lo mejor estaba por venir.

Lordi (Foto: Julia Martínez)

Después de la pausa el público estaba listo para recibir los dos golpes finales, pero la banda sorprendió después de lanzar el primer trallazo “Who’s Your Daddy”. Vestidos de navidad y con Mr. Lordi Claus, la banda entonó “Merry Blah Blah Blah” canción que cogió por sorpresa a todos los apegados al setlist ya que no estaba presente en los shows anteriores.

Lordi (Foto: Julia Martínez)

Para cerrar una presentación con broche de oro, la canción ganadora de Eurovisión 2006, canción que hizo que la banda tenga el reconocimiento que se han ganado y que sin duda es un himno en todos sus conciertos, la mítica “Hard Rock Hallelujah”. Siempre es un gusto poder disfrutar del gran espectáculo que Lordi brinda en vivo, solo queda esperar que el tiempo que tarden en venir no sea por otra pandemia mundial.